El verano de 2018 fue denunciado en las redes sociales el caso de la curiosa reconstrucción de este castillo. El monumento con 700 años de antigüedad se ha llegado a abandonar a pesar de estar sujeto a normas de conservación y protección que lo catalogan como Bien de Interés Cultural.
Los vecinos de esta cercana barriada de Jerez están indignados, ya que a este paso se va a cumplir un año desde que instalarón una chapa galvanizada en el lugar de un muro. La delegada de Torremelgarejo, Mari Conchi Martínez, recuerda cómo hace unas décadas se impartían clases a los niños dentro del propio castillo. Hoy denuncian que la propietaria de la fortificación (es una propiedad privada) no hace nada por conservarlo.
Hasta el momento ningún habitante de la barriada sabe si la chapa está por cuestiones de conservación y evita que el muro se caiga definitivamente o está ahí para quedarse. Lo seguro es que el pobre monumento, en su estado actual, no aguantaría ni una pequeña invasión de orcos de Mordor.
No debemos esperar lo peor
El divulgador que denunció este hecho, Agustín García-Lázaro, quiere no ponerse en lo peor y pensar que la chapa tiene un motivo para estar donde está. Él cree que "lo han apuntalado y tapado, o bien para que no se vea; o para que no lo estropee la lluvia".
Ojala sea verdad lo que dice García-Lázaro, pero ya falta menos de cinco meses para que se cumpla un año desde que ese "pedazo de muralla plateada" apareciese de un día para otro. Mientras tanto, los vecinos han querido reivindicar este despropósito y esperan que se solucione pronto, ya que el propio monumento es quien da nombre a la barriada.