La reina de Inglaterra, Isabel II, ha convocado de manera urgente a todo el personal del palacio de Buckingham para una reunión esta misma mañana.
Las convocatorias de este tipo son bastante frecuentes, no así el carácter de urgencia y el llamamiento en plena madrugada. La edad de la reina (91), como de su esposo, el duque Felipe de Edimburgo (96), ha disparado todas las alarmas, aunque una fuente desconocida citada por el diario Daliy Mail ha asegurado que "no hay motivos para preocuparse".
Sin embargo, ha llamado la atención la manera en la que se ha convocado el acto. Los empleados de todas las residencias reales del país han recibido en plena madrugada un llamamiento a desplazarse a Londres de inmediato. Está previsto que por la mañana se diriga a todos ellos el más alto conasejero de la Casa Real, Lord Chamberlain y el secretario privado y mano derecha, Sir Christopher Geidt.
A pesar de que se ha señalado que "no hay motivos para preocuparse", los medios han especulado con todo tipo de posibilidades, teniendo en cuenta el estado de salud de la reina, que no participó durante diez días en ningún acto público en plena época navideña.
El Palacio de Buckingham no se ha pronunciado por el momento, por lo que habrá que esperar para conocer las causas de esta convocatoria.
La Casa de Windsor cumple este año su centenario, tras su instauración en 1917 al desalojar a la Casa de Sajonia-Coburgo y Gotha, debido a su origen germánico y en un momento en el que las islas británicas se encontraban en plena guerra mundial contra Alemania.
