Se veía venir. Quizás por el descenso de sus ventas o por las críticas que despertaba, lo cierto es que el tradicional desfile de lencería de los famósos Ángeles de Victoria's Secret no volverá a ver la luz. Así lo ha confirmado la modelo australiana Shanina Shayk, hermana de también modelo Irina Shayk.
Shayk, embajadora de la marca desde 2011, ha confesado su tristeza a The Daily Telegraph por la cancelación del desfile: "Me siento rara, porque siempre por estas fechas estoy entrenando como un ángel".
La marca creada en 1967por Roy Raymond, quería mejorar su imagen, algo que finalmente no ha conseguido a juzgar por las críticas generadas edición tras edición. El evento anual atraía audiencias millonarias, no solo por los desfiles, las modelos y sus impresionantes outfits con las icónicas alas, sino por las actuaciones musicales que reunían a los cantantes más populares del momento como Rihanna o Lady Gaga.
Victoria's Secret ya había decidido no emitir su próximo desfile por televisión y prefiriendo presentar su próxima colección de lencería a través de la red, como ya anunciara enmayo de 2019. Sin embargo, uno de sus los rostros más reconocidos de la firma ha hecho pública una noticia que nadie esperaba. Ni Adriana Lima, ni Karlie Kloss, ni Sara Sampaio, ni Kendall Jenner saludarán al mundo este año desde la pasarela con sus conjuntos más atrevidos. Tampoco lo harán las españolas Helena Barquilla o Eugenia Silva.
Incesables críticas
La polémica ha girado en torno a la marca, propiedad desde 1982 de Limited Brands, a consecuencia del perfil único de modelo que desfilaban sobre la pasarela. Cuerpos extremadamente delgados y normativos, algo que ya no encaja en la sociedad actual, concienciada en el feminismo y rompiendo los tradicionales cánones de belleza. Esto, lo único que ha producido es un descenso en el número de ventas mundial.
Además, los intensos entrenamientos a los que se someten las modelos, así como las estrictas dietas han sido puestos en tela juicio. La marca no escuchó los comentarios e hizo caso omiso de las recomendaciones de sus seguidores, descartando modelos con tallas más grandes o modelos transexuales.
Kloss, que ya había dejado de desfilar para la compañía californiana, confesaba a la revista Vogue que la razón que le llevó a alejarse de la pasarela no fue otra que el poco gusto que le estaba cogiendo a la imagen que estaba proyectando de sí misma. "No mostraba quien yo era realmente, lo que quiero transmitir a los jóvenes sobre el concepto de belleza tampoco encajaba con ello".
Este y otras polémicas hicieron que Victoria's Secret perdiera más del 50% de sus ventas en 2018, dejando las finanzas de la compañía en números algo preocupantes y una inquietud persistente entre sus directiva. Los 10 millones de espectadores que se congregaban ante la televisión en el pasado pasaron a ser tan solo 3 millones.