Frivolidad, provocación, arte... Las redes han sido todo un cúmulo de comentarios por el último lanzamiento de Ralph Lauren, un mono de trabajo, como el que utilizan muchos empleados a diario, completamente manchado de pintura (al menos, con este efecto), pero con un coste de nada menos que 690 euros.
La prenda ha sido recientemente rebajada en España por la campaña actual y ha saltado a las redes, generando indignación en Twitter.
Muchos usuarios consideran que este tipo de movimientos, dentro del auge del denominado como 'street style', implican realmente romanizar la precariedad a la que se ve sometida la clase obrera por parte de las clases altas.
La marca Ralph Lauren ha sacado en España un mono "con gotas de pintura", simulando un mono de pintor por 483 euros. Este mono empezó a venderse en EEUU en octubre del 2020 por 620 dólares. De nuevo, asistimos a la romantización de la pecariedad. Va hilo ???????? pic.twitter.com/etECMC9tej
— Alejandra de la Fuente (@YoSoyAleFuente) January 12, 2021
Hay debate en las redes
Sin embargo, hay debate, porque no todos los usuarios aprecian el mismo espíritu. Algunos consideran que el mono representa, en realidad, un homenaje hacia los artistas plásticos que trabajan a diario con este tipo de indumentaria para no mancharse con su ropa.
???? En efecto: lo de Ralph Lauren tiene antes que ver con Grayson Perry, Briony Marshall, Pozo Blanco o Neo Rauch que con Pepe Gotera y Otilio. No hay ética obrera ahí, solo estética cultural. ???? pic.twitter.com/YrwqKKRWDP
— Blogueras de Mierda (@ShitBloggers) January 14, 2021
500€? Si, pero tú solo ves un mono con manchas de pintura. Quizás deberías de pensar las horas que habrá tenido el diseñador para pensar el diseño y confeccionarlo. Solo ves el precio y no lo que hay detrás de todo eso.
— Corbi (@vickycorbi) January 13, 2021
Eres libre de comprarlo o no, pero no subestimes el trabaj
Sin embargo, no hay que olvidar que este tipo de productos no suele sobrepasar los 30 euros en las tiendas habituales y que representa el trabajo de las clases obreras.
No es la primera vez que una firma de este tipo se ve envuelta en la polémica por un caso similar. Gucci, por ejemplo, fue objeto de polémica por vender zapatillas "viejas y sucias" por 700 euros.