"Soy un jurista con amplia vida profesional, equilibrado, amante de la libertad. El pluralismo es la base de nuestro régimen político y del modo de deliberación del Tribunal Constitucional. No soy más digno que ninguno de ustedes pero tampoco menos. Me siento plenamente independiente, sin condicionamientos, peajes ni equipajes".
De esta manera se ha defendido Enrique Arnaldo, el polémico jurista propuesto por el Partido Popular como nuevo miembro del Tribunal Constitucional, ante aquellos que ponen en duda su idoneidad para el cargo ante las más que serias sospechas y sombras por su vinculación con el partido que lo propone. Sin ir más lejos, ha participado activamente en la fundación FAES, presidida por José María Aznar.
Arnaldo no solo aparece en el sumario de la operación Lezo, con maniobras para colocar a "buenos" fiscales para el investigado expresidente madrileño, Ignacio González, sino que resultó imputado en la pieza cinco del caso Palma Arena, sobre las contrataciones ilícitas en la época del presidente del PP, Jaume Matas.
Cabe recordar que Arnaldo declaró como investigado en esta causa abierta por delitos de malversación y cohecho el 20 de febrero de 2010, porque en 2004 Matas le contrató por labores de asesoramiento para implantar la televisión pública balear y en 2007, al poco de abandonar el gobierno autonómico, Matas fue fichado por Arnaldo a cambio de 31.000 euros para que le "abriera puertas" en Estados Unidos, donde el expresidente iba a fijar su residencia.
Perfil a través de sus artículos
Para entender mejor el perfil de Arnaldo, basta con mirar su producción como articulista. Desde 2008 ha escrito más de 300 artículos de opinión en los que deja ver sus principios conservadores cuando no retrógrados. En sus textos ha criticado la ampliación de los tres supuestos de interrupción del embarazo o la llamada eutanasia activa porque, a su parecer, hacen que "se violenten algunos principios o alguna jurisprudencia por el camino". También tuvo a bien rechazar de plano, en referencia a la ley de memoria histórica, el empeño de tantas y tantas familias por exhumar las fosas de la guerra civil y el franquismo.
Ha cargado contra Catalunya, denunciando la "sostenida, constante, manifiesta, negligente y contumaz actuación de la comunidad autónoma de Cataluña de incumplimiento de sus obligaciones constitucionales y legales al declararse, sin más, zona exenta de la Constitución, al rebelarse contra la supremacía de ésta y sustituirla por su voluntad desnuda".
También ha dedicado gruesas palabras al José Luis Rodríguez Zapatero afirmando que su "legado es patético en todos los órdenes" o que es un "busto parlante". Llegó a decir esto sobre el expresidente del Gobierno: "Se sienta por las noches ante una pantalla panorámica armado con los mandos inalámbricos de la Play jugando a los marcianitos [...] que resuciten Los Reyes Católicos. Ha nacido su sucesor".
Actitudes poco éticas y relación con Casado
Y como muestra de otras actitudes poco éticas, Arnaldo organizó un máster en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, ligada al PP, donde enchufó a su hijo, y al hijo del que fuera fiscal general del Estado, José Manuel Maza. También invitó a dar clases a un puñado de jueces y a procuradores del Colegio Oficial de Procuradores de Madrid, de cuya junta directiva era el abogado.
El jurista mantiene una estrecha relación con Pablo Casado desde hace años, hasta el punto de que fue él quien acompañó al hoy líder del PP al despacho del antiguo director del Centro de Estudios Superiores Cardenal Cisneros, donde Casado aprobó 12 asignaturas que le faltaban para licenciarse en apenas cuatro meses, según recoge Cadena Ser.