El asesinato de Anna y Olivia ha conmocionado a todo un país. El caso se ha evidenciado como un nuevo episodio de violencia vicaria, "aquella que se define en la doctrina científica como la que ejerce un progenitor sobre un descendiente con objetivo de dañar al otro progenitor", explica Carlos Cuadrado, licenciado criminología y psicología. Tomás Gimeno planificó acabar con la vida de las pequeñas desde el principio, según explica la Guardia Civil.
La violencia de las muertes y la tierna edad de las pequeñas ha generado la duda sobre qué pudo suceder. Carlos Cuadrado plantea varias hipótesis, a la espera de que avance la investigación forense. Entre ellas: "Las mató para hacer daño a su exmujer y familiares; estaba lúcido y pensaba huir, pero trazó un plan con poca probabilidad de éxito -para lo que es importante determinar si murieron todos ahogados, solo él, si hay tóxicos en el organismo...-; estaba bajo los efectos de sustancias o brote psicótico y como consecuencia de los delirios se ha producido el trágico final; pretendía huir pero improvisó un final trágico al verse agobiado o, finalmente, surgió algo fortuito y murieron ahogados".
Sobre el perfil de Tomás Gimeno, el criminólogo también señala que, al no haber sobrevivido a los hechos, "solo podemos hipotetizar", por lo que plantea cuatro posibles perfiles que podrían encajar con su personalidad: "Un perfil psicopático, que no responde a un enfermo mental, sino una persona lúcida que sabe lo que hace y opta por ejecutar el mal. Luego, un perfil patológico pero falta información y no podemos saber si Tomás sufría alguna enfermedad mental. Es posible un perfil violento: hay testimonios que afirman que nunca haría daños a sus hijas, pero también hay quien dice lo contrario, que era agresivo, que odiaba a su expareja y que ha agredido a la actual de ella. Y un perfil macabro: distinguiendo el bien del mal, hace el mal a sabiendas de que hará más daño que bien, con pensamientos como 'si las niñas no son para mí, tampoco lo serán para nadie'".
"Personas muy bien integradas socialmente"
Llegados a este punto, cabe preguntarse si es posible detectar una personalidad como la de Tomás. Algo que Carlos Cuadrado, criminólogo, ve complicado: "Suponiendo que hablemos de una personalidad psicopática, es raro de detectar, son personas muy bien integradas socialmente y no suelen tener antecedentes de ningún tipo".
Y señala que, con la muerte de Gimeno, "nunca sabremos la motivación real", por lo que añade que "pudo ser por miedo, venganza, desesperación, hacer daño, patología mental, consumo de sustancias, brote psicótico primario, etc".
