El expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha decidido continuar como líder de la oposición, al menos, hasta el final de la legislatura. El líder popular tiene la intención de agotar la legislatura y no descarta volver a encabezar una lista electoral en las próximas elecciones.
Toda esta cadena de decisiones podría ser fatídica para el partido que ha gobernado España durante más de 14 años. El trasvase de votos y militantes hacia Ciudadanos es un hecho y las filas de Nuevas Generaciones están recibiendo toda una oleada de bajas. Además, un sondeo elaborado por Metroscopia y que aún no cuenta con la cocina necesaria, sitúa a la formación de Rajoy en una posición similar a las que ocuparon Izquierda Unida y UPyD durante las pasadas legislaturas. Quizás por ello, han optado por realizar el traspaso de poderes de manera inmediata para que Sánchez ostente el Ejecutivo.
¿Por qué no se produce una renovación en el Partido Popular? ¿Qué sucede dentro de sus filas? ¿Por qué su círculo cercano mantiene su apoyo cerrado al líder?
Una estructura piramidal
Mariano Rajoy ha creado una auténtica estructura piramidal en la composición orgánica del PP. La destitución de Acebes y Zaplana supuso el control total del partido y el final de los restos del 'aznarismo'. Tras la retirada, llegaron Cospedal y Soraya. Ambas con un perfil muy bajo (Soraya, de hecho, no contaba con una carrera relevante ni vinculación al PP), pero que ahora ocupan la primera línea.
Rajoy, a quien debían el desarrollo sus carreras políticas, decidió crear bicefalias en la escala de poder que iba desarrollándose bajo su mandato. Soraya en el Gobierno y Cospedal en el partido. Feijóo en Galicia y, posteriormente, Cifuentes en Madrid.
Estos movimientos son perfectos para iniciar una serie de luchas internas para suceder al presidente y conseguir la cima de todo político: llegar a la presidencia del Gobierno. Además, la necesidad de padrinos para ascender en el PP y el poder del 'dedo divino' son determinantes para que el presidente disfrute de un círculo que no se destaca por la crítica.
Quizás por ello, en plena guerra Soraya-Cospedal y tras la caída de Rajoy, la segunda corrió hacia la tribuna y, con gesto serio y determinante, espetó lo siguiente: "Rajoy no va a dimitir, es lo que necesita el PP y España".
M. Rajoy
Ostentar un escaño en el Congreso de los Diputados permite disfrutar del aforamiento y, por tanto, que las causas judiciales queden bloqueadas a la espera de que el Tribunal Supremo decida.
Se trata del mismo movimiento que intentó Cifuentes tras dimitir por su máster irregular, aunque finalmente tuvo que abandonar el sillón por decisión de Rajoy. El mismo que espetó "a las 12 la quiero fuera" cuando se publicó el vídeo de sus cremas.
La expresidenta madrileña se encuentra ahora imputada en dicha causa, aunque Rajoy podría enfrentar una situación peor: una imputación en la Trama Gürtel, el presunto cobro de sobresueldos y, quizás, su relación con la financiación irregular del partido.
En los papeles de Bárcenas, que cuentan con toda la credibilidad en palabras de las fiscal anticorrupción Concepción Sabadell, aparece el nombre de M. Rajoy con la cifra de 2.100.000.
La imposibilidad de continuar con el desarrollo de las investigaciones (y a falta de que Bárcenas 'tire de la manta') no permite demostrar que el mencionado pago sea real. Sin embargo, Rajoy podría sufrir la apertura de una causa en el caso de que abandonase su escaño.
Voces díscolas, el Congreso de 2008 y la (hasta ahora) eterna suerte de Rajoy
Hemos comentado la creación de una estructura piramidal dentro del PP, pero no la forma en la que se actúa con los miembros díscolos. Con la derecha más acérrima acorralada de VOX, ahora el presidente se enfrenta a otros 'dragones' como las voces que piden una profunda regeneración.
La más importante la representan dos barones: Juan Vicente Herrera en Castilla y León; y Alberto Núñez Feijóo en Galicia. Ambos han pedido cambios en el PP (Herrera, por ejemplo, ha destinado fondos públicos para abrir las fosas del franquismo).
Son barones importantes, pero otros miembros como la vicesecretaria de Estudios y Programas del Partido Popular, Andrea Levy, que aseguró que "toca pedir disculpas" por la sentencia de la Gürtel, se han visto apartadas por orden de Génova.
Rajoy cuenta con total poder desde el Congreso de Valencia de 2008 tras finalizar con las pretensiones nacionales de Esperanza Aguirre. Su capacidad de acabar con adversarios, dejando que se cuezan en su propia salsa mientras se 'fuma un puro' se acaba. La caída de las encuestas empieza a fortalecer los movimientos, las peticiones de regeneración, refundación e, incluso, cambio de siglas.
¿Qué sucederá a partir de ahora? ¿Cuál será el futuro de Rajoy? Todo puede cambiar en cuestión de meses.