El café supera al té como la bebida más consumida en la mayoría de países, incluyendo a España. El té tiene gran predicamento en la cultura anglosajona y árabe y, aunque en nuestro país no es tan popular, sus beneficios para su salud lo hacen muy recomendable.
Los especialistas destacan el elevado contenido en antioxidantes que se encuentran en la bebida, los cuales previenen el desarrollo de enfermedades crónicas. Se trata de las catequinas, cuyo ejemplo diferenciador es la galato epigalocatequina o EGCG en sus siglas inglesas.
Este compuesto, por ejemplo, reduce los riesgos que se pueden experimentar para nuestra salud. El consumo habitual de té se ha relacionado con un menor riesgo de sufrir cáncer en general, especialmente en el caso de la piel, próstata, pulmón y mama.
El té negro tiene especial incidencia a la hora de evitar sufrir una enfermedad como la diabetes mellitus tipo 2. Esta bebida tiene potencial para reducir los niveles de azúcar en sangre tras comidas ricas en sacarosa. Esto reduciría el reisgo de acabar padeciendo diabetes tipo 2 a largo plazo.
Además, el té verde, gracias a su riqueza en polifenoles, se ve relacionado con una mejor tolerancia al estrés, además de un menor riesgo de sufrir la enfermedad del Alzheimer.
Una larga lista de beneficios
Si todo esto parecía poco, los resultados de un estudio publicado en el Journal of Oral & Maxillofacial Pathology evidencian que un té diario, en especial el verde, tiene efectos antibacterianos, pudiendo reducir el riesgo de enfermedades dentales y periodontales, sino también las cardiovasculares.
Por otro lado, esas propiedades antiinflamatorias ayudan a mantener relajados los vasos sanguíneos, ayudando a reducir la tensión arterial y mejorar la función del corazón. Las recomendaciones llegan a extenderse, en este caso, hasta las tres tazas de té negro por jornada.
La cafeína que contiene una taza de té mejora también la atención y el estado de alerta, aunque esto es opcional, porque también existe el té de hierbas libre de cafeína con el que podemos mejorar la calidad de nuestro sueño.
Como todo, su toma en exceso también es perjudicial. Un consumo excesivo de catequinas puede provocar problemas para absober el hierro. Además, la toma excesiva de cafeína puede generar problemas en el sistema circulatorio. Especial precaución hay que tener con los medicamentos para el corazón y la presión arterial: las catequinas pueden causar interacciones medicamentosas, por lo que en este caso debería limitarse o eliminar directamente su consumo.