Los retrasos y cancelaciones en los trenes están sembrando el caos en las estaciones de toda la geografía española. Especialmente en las últimas semanas, pues el mes de julio apremia y cada vez son más los que quieren coger ese tren que les lleve a su destino vacacional en el que poder disfrutar de esas vacaciones de ensueño. Sin embargo, la Confederación General de Trabajadores no se lo está poniendo fácil a los miles de turistas que adquieren un billete cada día.
Renfe volverá a sufrir parones y sus servicios se verán reducidos después de que la CGT haya anunciado que la empresa volverá a cesar sus servicios en los días 31 de julio, 14 y 30 de agosto y 1 de septiembre. No ha tenido que pasar mucho tiempo desde que la anterior huelga convocada por Comisiones Obreras no tuviera el efecto deseado y los empleados de Renfe vuelvan a manifestarse durante los días mencionados. Solo por aquel entonces, el 15 de julio se cancelaron 320 trenes.
INFO: Renfe garantiza los servicios mínimos decretados por Fomento para la jornada de huelga convocada por el sindicato CGT para el miércoles, 31 de julio, entre las 12.00 y las 16.00 h y las 20.00 y las 24.00 h.Consulta aquí los servicios mínimos ????https://t.co/3dGnWfgdDD
— Renfe (@Renfe) 29 de julio de 2019
Desde luego son fechas clave, que a más de uno no solo le supondrán gastos económicos innecesarios, sino una gran pérdida de tiempo. Atienden a la operación salida y retorno, por lo que el número de afectados será previsiblemente mayor. El número de trenes parados suma un total de 1.152 entre las cuatro fechas señaladas por la CGT.
¿Qué hacer?
En primer lugar, lo primero que debes hacer es saber si tu tren ha sido cancelado, por lo que debes consultar su estado en la página web de Renfe o en las comunicaciones que hayas recibido por parte de la compañía. En caso afirmativo, lo siguiente es comprobar cuándo se hizo público el anuncio de la cancelación por parte de Renfe, ya que podría ser lo que respalde una posible conmpensación.
La compañía tiene la obligación de publicar la suspensión de servicios ferroviarios al menos con 48 horas de antelación, antes de que sean efectivos. En este caso, se anunciaron el 29 de julio antes del mediodía y como el paro comienza el 31 de julio a las 12:00, estarían dentro de la regularidad y habrían cumplido con lo establecido en el Reglamento de viajeros. En todo caso, si se diera la situación contraria y no se hubiera anunciado la supresión del servicio con la suficiente antelación, Renfe tendría que reembolsarte el doble del importe que pagaste originalmente por tu billete.
Ante la cancelación con el tiempo suficiente que no avalen esta hipotética situación, que pese a que es cuanto menos una gran compensación por las molestias ocasionadas, si el Reglamento se cumple y la supresión ha sido anunciada con tiempo suficiente, la compañía procederá a reubicarte, lo cual hace por defecto, o si lo solicitas, reembolsarte el dinero del billete. Renfe te reubicará en alguno de los trenes que circulan durante la jornada de servicios mínimos, o simplemente en el más próximo temporalmente que se disponga a circular.
Si tu intención es no proceder con el viaje planteado podrás solicitar el reembolso del precio original que pagaste cuando adquiriste el viaje, a través de cualquier punto de venta de la empresa. En caso de daño adicional, habría que pasar por los tribunales y dejar que el juez decida la indemnización o sanción correspondiente para la corporación ferroviaria.