El rapero Kanye West está siendo objeto de múltiples polémicas durante las últimas semanas que le están llevando a la cancelación de contratos profesionales y un ostracismo profesional. Entre ellas, publicar la imagen de una esvástica fusionada con la estrella de David, elogiar a Hitler, negar el Holocausto y publicar comentarios antisemitas.
Twitter ha cerrado su cuenta por "incitación a la violencia" y varias empresas, entre ellas Adidas, ya han suspendido sus contratos comerciales con el rapero. Todos estos actos están repercutiendo en sus cuentas y en su carrera, pero Kanye West sigue, no para.
El rapero habló abiertamente en 2018 sobre la "condición mental" que padece. El rapero, con 24 premios Grammy a sus espaldas (uno de los artistas más premiados de todos los tiempos) reveló entonces que había sido diagnosticado dos años antes de dicho trastorno.
En aquella época hablaba sobre la realidad de personas que no tenían acceso a trabajos tan flexibles como el suyo para compatibilizar con su situación: "Pensar en alguien que hace lo que yo hice en TMZ, pero en su trabajo, y luego llega el martes y pierden su empleo y no pueden dar marcha atrás y hacerlo. Es por eso que Dios me puso en esto, a los 40 años", relató entonces West, sobre una polémica entrevista con el portal de noticias, donde generó controversia por unos comentarios sobre la esclavitud.
Kim Kardashian también habló sobre su bipolaridad en su cuenta de Instagram: "Aquellos que entienden las enfermedades mentales o incluso el comportamiento compulsivo saben que la familia es impotente a menos que el miembro sea menor de edad". Y añadió: "Entiendo que Kanye está sujeto a críticas porque es una figura pública y sus acciones a veces pueden causar fuertes opiniones y emociones. Es una persona brillante pero complicada que, además de las presiones de ser un artista y un hombre negro, experimentó la dolorosa pérdida de su madre, y tiene que lidiar con la presión y el aislamiento que aumentó su trastorno bipolar".
¿Qué es el trastorno bipolar?
El trastorno bipolar es una enfermedad que causa cambios extremos en el estado de ánimo, que comprenden episodios emocionales altos, que suceden a temporadas de bajones emocionales, conocidas como depresiones.
La persona, por tanto, vive temporadas de elevada euforia, llenas de energía, con gran actividad. Durante las depresiones, la persona por el contrario puede sentirse triste o desesperanzado, así como perder el interés o placer por las actividades. Los cambios en el estado de ánimo pueden afectar al sueño, energía, nivel de actividad, juicio, comportamiento y capacidad para pensar con claridad del paciente.
Para su control, es necesaria la combinación de psicoterapia con un tratamiento farmacológico que permitan ayudar a identificar los episodios y controlar los cambios en el estado de ánimo siguiendo siempre un plan de tratamiento.