Barack Obama escogía Chicago, ciudad donde inició su carrera política, para pronunciar su discurso de despedida. En una sala donde se habían congregado miles de personas, el aún presidente recordaba a la población que debe mantenerse alerta sobre las distintas amenazas que pueden atacarles en un futuro, entre ellas el nuevo presidente Donald Trump.
1 El lugar de su discurso
La despedida del Presidente es uno de los actos tradicionales que acompañan la salida del principal mandatario de los Estados Unidos de la Casa Blanca. Sin embargo, cada dirigente elige la manera en la que dice adiós a sus ciudadanos. Por ejemplo, Reagan y Clinton escogieron un discurso televisado en el Despacho Oval y George Bush lo hizo en una reunión íntima de allegados en el salón del Este de la Casa Blanca.
Obama, en cambio, ha convertido sus últimas palabras en un auténtico baño de masas, acompañado de miles de personas en una sala de conferencias llena de gente que lo ovacionó como nunca.
2 'Estados Unidos es un lugar mejor y más fuerte'
Fueron varias las referencias de Obama a la grandeza de su nación: "Es ese espíritu el que nos ha hecho una potencia económica, que nos hizo despegar de Kitty Hawk y Cabo Cañaveral; el espíritu que cura enfermedades y pone un ordenador en cada bolsillo (..) que nos permitió resistir al fascismo y la tiranía durante la Gran Depresión". Sin embargo, el aún presidente no dudó en asegurar que "Estados Unidos es un lugar mejor y más fuerte" que al inicio de su mandato, afirmando que ha sido posible gracias a la toma de decisiones en conjunto con el pueblo.
Aún así, dejó una pequeña advertencia para la sala, pidiendo a sus ciudadanos que estén atentos para hacer frente a los "muchos desafíos" a los que Washington aún se enfrenta.
3 Ataques a Trump y la cuestión de la raza
La mención a su sucesor no podía faltar. No obstante, Obama prefirió no dar minutos de protagonismo a Donald Trump evitando nombrarle directamente, pero si abordó la cuestión de la raza, uno de los aspectos más polémicos de la campaña del republicano. En su discurso Obama recordaba que este tema "sigue siendo una de las fuerzas más potentes y, a menudo divisiva" de la sociedad estadounidense, aunque ha recalcado que las relaciones interraciales son "mejores que hace 10,20 ó 30 años, independientemente de lo que diga la gente".
Así mismo, en un intento de hacer reflexionar a la población sobre este tema ha recordado: "Si no estamos dispuestos a invertir en los hijos de los inmigrantes, disminuimos las perspectivas de nuestros propios hijos".
4 Presencia de las minorías
Las políticas del demócrata no solo se han centrado en la raza como minoría, sino que también ha intentando emprender medidas de protección para la mujer, el colectivo LGTB y las distintas etnias religiosas. "Para demasiados de entre nosotros es más seguro quedarnos en nuestras burbujas, rodeamos de gente parecida a nosotros mismos", señalaba, advirtiendo sobre la necesidad de defender las leyes "contra la discriminación" que se han promulgado en todos los sectores, desde la contratación del sistema de justicia, pasando por la educación y la vivienda.
5 La lucha contra el DAESH
Hilando con el último punto, Obama hacía una referencia clara a la 'cruzada religiosa' que vive el mundo: "Rechazo la discriminación contra los americanos musulmanes, que son tan patrióticos como nosotros. No podemos retirarnos de las luchas globales, para extender la democracia, los Derechos Humanos, los derechos de las mujeres y de la comunidad LGTB, lesbianas, gays, transexuales y bisexuales, sin importar cómo de imperfectos sean nuestros esfuerzos ni cómo de apropiados puedan parecer esos valores", sentenciaba.
Sin duda, uno de los mayores desafíos a los que se ha tenido que enfrentar la administración de Obama ha sido la lucha con el DAESH, que desde 2014 comenzó a sembrar el pánico en el mundo, invadiendo varios territorios en Siria e Irak y perpetrando numerosos ataques terroristas en el mundo. En esta línea, el demócrata se ha mostrado orgulloso de la acción del ejército estadounidense: "Ha sido el honor de mi vida ser vuestro comandante jefe".
En una última advertencia a los peligros que se pueden cernir sobre Estados Unidos en el futuro, ha recordado que un ejército no es suficiente para esta lucha ya que "la democracia puede desplomarse cuando se cede ante el miedo". Por ello ha pedido a sus ciudadanos que se mantengan vigilantes ante cualquier agresión externa y el debilitamiento de "los valores que hacen a los estadounidenses ser lo que son".
6 Michelle, modelo de primera dama
Durante todo el discurso, la esposa y la hija mayor del presidente escuchaban emocionadas las palabras de Obama. Michelle ha sido una primera dama activa, y se ha implicado en varias cuestiones sociales de su país. Además, siempre ha permanecido al lado de su marido, haciendo de su carrera como presidente un trance más fácil. Esto es precisamente lo que ha querido recordar el demócrata en su discurso: "Michelle, durante los últimos 25 años has sido no sólo mi esposa y madre de mis hijas, sino mi mejor amiga (...) Las nuevas generaciones apuntan más alto porque la tienen a ella de modelo a seguir".
7 Su vicepresidente, su hermano
En su despedida no podía faltar una mención a su vicepresidente, a quien ha felicitado por su gran trabajo al frente de la Casa Blanca y a quien ha confesado que no solo ha sido su segundo, sino también "un hermano". Después de este emotivo momento, ambos intercambiaron un gran abrazo.
8 'Si pudimos'
Un joven Obama aspiraba a entrar en la Casa Blanca con un discurso lleno de fuerza y positivismo. El lema característico de su campaña fue el 'Yes, we can' (Sí, se puede), frase que pasó a la posteridad y que le ha acompañado a lo largo de sus dos legislaturas. En sus últimas palabras, la máxima no podía faltar, diciendo adiós finalmente con un 'Sí, pudimos'.