España tiene una gran tarea pendiente, una que lleva arrastrando desde hace 42 años. El 20 de noviembre de 1975, la dictadura franquista expiró con la muerte de Francisco Franco, que sometió al país durante casi cuatro décadas. Los españoles tuvieron que quitarse de encima un rancio velo que los mantuvo alejados del progreso y la libertad. Llegó el turno de la democracia gracias a la venerada Transición, aunque no todo se hizo bien.
Se trató de fundamentar un nuevo país sin barrer las miseras de la etapa anterior y sin curar las heridas de una sociedad que había sido aplastada. Y así seguimos hoy en día. Sin una condena del franquismo, sin una reparación a sus víctimas, aún con cadáveres en fosas comunes y con un dictador enterrado entre honores al que aún se le hacen homenajes el día de su muerte.
Con esta deficiencia democrática que resulta impensable en otros países que han pasado por dictaduras, España continúa hacia adelante entre aquellos que quieren cambiar las cosas, los que prefieren hacer como si nada hubiera pasado, o los que miran con nostalgia aquellos años.
Las críticas de Puigdemont
Por todos es sabido que el principal partido que se niega a emitir una condena explícita del franquismo es el Partido Popular. Por el contrario, desde la izquiera son muchos los políticos que luchan y denuncian por cambiar las cosas reparando unas heridas que nunca se curaron.
El último político en denunciar esto ha sido Carles Puigdemont. El expresident de la Generalitat, exiliado en Bélgica por haber organizado un referéndum ilegal y haber declarado unilateralmente la independencia en Cataluña, ha utilizado Twitter para acriticar que se siga homenajeando al dictador: "Hoy hace 42 años que Franco murió y su tumba sigue siendo venerada dentro de un monumento turístico pagado con presupuesto público del gobierno español. Europa 2017".
Franco died 42 years ago today and his grave is still revered inside a touristic monument paid through the Spanish state budget. Europe 2017 pic.twitter.com/zTUyeuvkXs
— Carles Puigdemont ???? (@KRLS) November 20, 2017
Ha acompañado el mensaje con la fotografía de un joven delante de la tumba del Franco repleta de flores en el Valle de los Caídos. Con la mano derecha en alto haciendo el saludo fascista, el hombe se sitúa al lado de una mujer mayor arrodillada y de una pareja con gesto solemne.
