La segunda semifinal de Eurovisión 2024 fue probablemente de las más movidas y tensas de la historia reciente del festival. El estreno en el certamen de la KAN de Israel con su representante Eden Golan puso patas arriba la ciudad de Malmö, con unos dispositivos de seguridad inusitados para la celebración de una semifinal. Evacuando centros comerciales anexos, con helicópteros sobrevolando el pabellón, y con bastante cuidado durante la actuación de evitar un gran boicot por parte de la comunidad eurofan, la israelí realizaba su pase en el escenario, pasaba a la final, y la polémica se trasladaba luego a la sala de prensa.
Colocada justo al lado de la puerta de la sala de prensa por motivos de seguridad, Israel recibía por primera vez preguntas de los periodistas en Malmö, ante la reacción de algunos compañeros como el neerlandés Joost o Marina Satti, que se quedaban ojipláticos ante la situación, la ausencia de respuestas y la tensión que se cortaba con un cuchillo. El propio Joost incitaba a preguntarle a la EBU por si esa "unidad por la música" que reza el eslogan de Eurovisión se andaba cumpliendo, y más de un clasificado de esa semifinal trataba de mostrar su descontento con la presencia de Israel en esa sala.
Marina Satti literalmente se ha echado a dormir con las declaraciones de Israel. #Eurovision pic.twitter.com/bWj95YwAyp
— Luis Mesa ? (@luismesacabello) May 9, 2024
Todo esto se magnificaba con un invitado inesperado que ponía todo patas arriba: el televoto de la RAI de Italia. Y es que nada más acabar la semifinal, la televisión italiana publicaba por error los datos del televoto de la semifinal, dejando a Israel con un tremendo 41% del televoto transalpino, cuatro veces más que el segundo clasificado. Levantándose todas las alarmas, Israel comenzaría a subir como la espuma en las casas de apuesta, pasando del quinto al segundo puesto y muy probablemente alertando de que las lidere antes de la final del sábado.
Más allá de la pompa del boicot, hay países MUY a favor de las operaciones en Gaza.
— Luis Mesa ? (@luismesacabello) May 9, 2024
Italia es uno de ellos, y va camino de colocarle 24 puntos en la final. #Eurovision
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Como si fuera un flashback, la prensa especializada ya recordaba el camino de 2022 y el suceso similar con la victoria de Kalush Orchestra en Turín 2022, aunque aquí con un matiz bien importante: la causa ucraniana fue más o menos unánime en ese televoto, aquí el resultado llegaría con una grandísima cantidad de países y espectadores en contra. Como si fuera una victoria a dos días de la final, la noche acababa con un tuit de la propia cuenta oficial de Israel en Twitter celebrando ese resultado, y avisando que el 'huracán' de Eden Golan había llegado a Malmö, y que puede ir a más. Entonces: ¿Puede ganar Israel Eurovisión? Vamos a barajar datos para ello.
Un mundo polarizado pero muy fiel para Israel
Cuando las causas extramusicales entran en Eurovisión, entran con todo. La sensación es que Israel, con una presumible victoria en Eurovisión, busca cierta legitimación europea de sus acciones en Gaza, algo así como el primer plebiscito y triunfo en el conflicto en un plano fundamental como es el de la cultura y sociedad. Para ello, los hebreos cuentan con el gran aliado que es la diáspora judía, y el punto extra de considerar la participación en el Eurofestival como una auténtica causa nacional.
Tras meses luchando por que la candidatura llegara a Malmö, la presencia en el festival fue el primer triunfo, en un mensaje claro y conciso: pese a que andan contra mí, aquí estoy. Crecidos ante los abucheos, las peticiones de boicot y el hate en redes, la KAN lleva meses alertando de que Malmö es una ciudad especialmente antisemita, y que la seguridad anda reforzada como nunca para la participación de Eden Golan. Sin presencia en eventos asociados al festival, ni siquiera en al alfombra roja, la semifinal del jueves fue la primera presencia pública de la artista.
Una más de la cadena israelí Keshet 12.
— Luis Mesa ? (@luismesacabello) April 14, 2024
Atreverse a afirmar que terroristas islámicos valoran atacar el Malmö Arena durante #Eurovision.
Hoy el Daily Mail se hace eco. Llevan semanas tratando de vender Malmö como una ciudad antisemita, y esta es la última idea. pic.twitter.com/CM5t1bzHKw
Junto a ello, si bien la burbuja eurofan es generalmente de cariz progresista y apuesta mucho por el boicot o al menos por no mencionar la candidatura, no podemos olvidar que hay países firmes aliados de Israel en la causa contra Palestina, con Alemania e Italia como principales nombres. El televoto de Italia anoche corresponde a un apoyo firme, uno de esos países de los que podríamos esperar 24 puntos en la noche del sábado (12 de jurado y 12 de televoto). Frente a ellos otros muchos tenderán a no dar nada, aunque la diáspora les puede hacer rascar puntos de todos sitios. Cuando la causa no es musical ni cultural, sino política y de defensa de tu país, te puede valer todo.
Ejemplos como ver cómo en la preselección de Islandia sería el voto israelí lo que frenara la presencia del palestino Bashar Murad en Eurovisión explica que toda la maquinaria anda en marcha para que ganen este festival, y sea un triunfo en contexto europeo. El problema es que de camino se lleve el festival más abierto en años, propuestas musicales que vienen con el único objetivo de reflejar su cultura a través del arte, y acabe asestando al festival un nuevo golpe: el de ver como en apenas cinco años se dan dos victorias por un propósito geopolítico y no tanto musical, algo que en un evento que se declara absolutamente apolítico como es Eurovisión es un problema grave.
