Si eres mujer y vas andando sola o con amigas por la calle, seguro que alguna vez has recibido alguna palabra de un hombre que hace referencia a tu físico, lo que ellos llaman 'piropo'. En pleno 2017, aún cuesta entender que ellas quieren ir por la calle sin que un hombre desconocido le diga lo "buena" que está o las cosas que le "haría". Esto tiene un nombre y se llama acoso callejero, uno de los problemas cotidianos a los que se tiene que enfrentar una mujer por el simple hecho de serlo.
Si dices que te molesta, te llaman radical. Pero, en el lado contrario, ningún chico se ve intimidado porque una chica le diga por la calle lo que piensa de él. ¿Por qué? Porque esto no es la norma, ni suele ocurrir. Y, por otro lado, ningún hombre se ha visto obligado a cambiar su dirección para evitar que ninguna mujer pueda llegar a hacerle algo. Algo que, en el caso de ellas, prácticamente sucede a diario. Aquí una buena dosis de empatía:
Cuesta creer que los 'piropos' molestan, o que por ser mujer nos vamos por otro lugar si vemos a un grupo de hombres. Sin embargo, ocurre muy a menudo. Para ser conscientes, lo mejor es preguntar a una amiga, hermana, madre, tía, prima... A ver qué os dicen. Y si os sigue costando entenderlo o no queréis preguntar podéis atreveros a formar parte de un proyecto que ha llevado a cabo la artista Terra Lopez, en el que podéis poneros en nuestra piel para sentir lo que es el acoso y la intimidación callejera.
Conseguir que ellos sufran en primera persona el acoso
Su trabajo se llama 'Rituals of Mine' y consiste en un espacio oscuro en el que los hombres deben ponerse unos auriculares a través de los que escucharán grabaciones reales de frases de acoso callejero. Así, los chicos podréis estar más cerca que nunca de lo que implica ser mujer y sufrir dicriminación por el simple hecho de serlo. "Espero que los hombres escuchen esto y sepan que no les estamos atacando. Sólo intentamos que entiendan que esto es lo que se siente", asegura Terra Lopez.
Además, para que haya igualdad real, toda la sociedad tiene que participar en los avances, ya que si nos quedamos sólo en la teoría, todo seguirá siendo desigual. Por tanto, si eres hombre y entiendes que un 'piropo' no resulta agradable para una mujer; no se lo lances. Además, tampoco permitas que ningún amigo tuyo lo haga. No queremos vuestros 'piropos', sino vuestro respeto.
