El modelo de grandes almacenes de El Corte Inglés ofrece una importante diversidad de productos, aunque algunos de ellos han generado polémica por la controversia que entrañan. De este modo, la asociación Igualdad Animal ha organizado protestas ante los grandes almacenes para exigir que la empresa deje de vender foie gras en sus establecimientos.
La organización ha realizado las concentraciones en Madrid, Barcelona, Valencia, Alicante y Murcia, como parte de una campaña con la que reclaman acabar con la producción de foie gras en todo el mundo.
Los asistentes portaron carteles con consignas como "El Foie Gras es Tortura" y "La Alimentación Forzada es Sufrimiento", para denunciar las condiciones violentas a las que se ven sometidos los patos y ocas durante la producción de foie gras.
La organización denuncia que los animales son sometidos a alimentación forzosa, con grandes cantidades de comida que provocan que sus hígados terminen por enfermar. Este proceso genera un gran sufrimiento en las aves que deriva en dolor físico, estrés crónico, picos rotos, dificultad para respirar o problemas de movilidad.
"La responsabilidad corporativa de las empresas tiene que tener en cuenta el bienestar animal. Por eso reclamamos a El Corte Inglés una política de bienestar animal con la que se comprometa a dejar de vender este producto lleno de crueldad", ha defendido Beatriz Medina, de igualdad Animal.
España es uno de los cinco países de Europa donde todavía se produce foie gras
La producción de foie gras encuentra cada vez más prohibiciones a nivel internacional. Está abiertamente prohibida en 18 países y se ha erradicado progresivamente fuera de nuestras fronteras. España mantiene este mercado, siendo uno de los cinco países de Europa donde todavía se produce.
La campaña realizada por la asociación quiere llamar a los grandes almacenes a liderar el movimiento en el sector para que se erradique la producción de foie gras en nuestro país. Por el momento, lideran España, Bélgica, Francia, Bulgaria y Hungría, con más del 90% de la producción dentro de la UE en 2020.
Por el contrario, 18 países han establecido legislaciones que prohíben por completo su producción. Se trata de Argentina, Austria, Dinamarca, República Checa, Finlandia, Israel, Turquía, Alemania, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Noruega, Polonia, Suecia, Suiza, Los Países Bajos y Reino Unido.
La organización ya realizó una campaña en 2014 que dio pie a que el Gobierno de India prohibiera la importación de este producto, siendo el primer país a nivel internacional que adoptaba una decisión de estas características. Además, se ha iniciado una recogida de firmas contra la alimentación forzosa de los animales que está a punto de alcanzar 100.000 firmas.
