PSOE y Sumar han llegado a un pacto para un nuevo Gobierno de coalición progresista. Entre las medidas anunciadas por Pedro Sánchez y Yolanda Díaz se recoge el compromiso de reducir los vuelos cortos nacionales cuando haya una alternativa de transporte ferroviario de dos horas y media.
"El tren está llamado a ser el transporte del siglo XXI", manifestaba la líder del partido rosa durante la escenificación del acuerdo junto al presidente del Gobierno en funciones. "Han de acabarse los vuelos cortos siempre que haya alternativa en tren", añadía, subrayando el compromiso de ambas formaciones en este sentido.
Esta medida tiene como objetivo reducir las emisiones de carbono, que son mayores en los viajes en avión. Asimismo, esta propuesta ya fue aplicada en Francia en marzo de este año, donde ha eliminado tres rutas aéreas del interior del país. "No podemos obviar el futuro. La revolución verde tiene que ser una prioridad en esta legislatura", manifestaba la vicepresidenta segunda en funciones a través de sus redes sociales.
No podemos obviar el futuro. La revolución verde tiene que ser una prioridad en esta legislatura. No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras que España se convierte en un desierto.
Pero la crisis climática no pueden pagarla los de siempre.— Yolanda Díaz (@Yolanda_Diaz_) October 24, 2023
Ante el catastrofismo de algunos, que consideran que esta medida coarta la libertad de los pasajeros, y las buenas intenciones de otros en su preocupación por cuidar el medio ambiente, lo cierto es que la medida anunciada por PSOE y Sumar tiene una aplicación tan limitada, que no afectaría a ninguna ruta nacional. Todo queda, pues, en papel mojado.
El documento en el que desgranan los acuerdos alcanzados, en lo referente a este se apunta que quedarán excluidos de esta medida aquellos destinos que tengan un "aeropuerto-hub que enlacen con rutas internacionales", como serían Madrid y Barcelona. Desde Aena, además, confirman que también se pueden considerar hub los aeropuertos de Málaga y Alicante.
Excluyendo estos aeropuertos, no hay ningún vuelo comercial operado en España que tenga una alternativa en tren de menos de dos horas y media. Tres trayectos se quedarían muy cerca, superando por escasos minutos el límite establecido, por lo que también quedarían fuera de la norma:
- Madrid - Sevilla (2:33 horas)
- Madrid - Málaga (2:36 horas)
- Madrid - Murcia (2:48 horas)
Ateniéndonos al límite de tiempo estipulado, la única ciudad que podría verse afectada es Valencia, cuyo trayecto en AVE no llega a las dos horas. Sin embargo, como en los anteriores trayectos, al estar conectadas estas ciudades con un aeropuerto-hub como es el caso del de Barajas, quedarían exentas de aplicar la medida.
Asimismo, otras rutas entre grandes ciudades no se verían afectadas por la medida porque el recorrido ferroviario dura demasiado, como es el caso de Madrid-Bilbao o Madrid - Santiago. En otro caso, directamente no existen vuelos regulares con un número relevante de pasajeros, como por ejemplo Madrid - Zaragoza o Barcelona - Zaragoza.
El caso de Francia
A falta del texto final que especifique cada medida del acuerdo, el Ministerio de Transportes tendrá que hacer un estudio para determinar exactamente qué vuelos serán afectados por esta medida, que en Francia ya se puso en marcha hace unos meses para reducir las emisiones de CO2 y luchar así contra el cambio climático. Se convertía, pues, en el primer país de la Unión Europea en restringir este tipo de vuelos domésticos.
En el país vecino ya se han prohibido los vuelos que recorren distancias inferiores a 400 kilómetros o que tienen una alternativa ferroviaria de dos horas y media, lo que ha tenido efecto inmediato en los enlaces aéreos entre Nantes, Burdeos, Lyon y París-Orly.