El Consejo de Ministros aprobó el pasado viernes 29 de marzo una revisión del 'Catálogo español de especies invasoras'. Este índice recoge cuáles son los ejemplares vivos que tienen prohibida su posesión, transporte, tráfico o comercio. A la lista se han añadido el cerdo vietnamita, el varano de la sabana (un lagarto de tamaño mediano), la pitón real y la tortuga de la península.
Peligro para la biodiversidad
Aunque parezcan animales inofensivos (en su mayoría), el problema es que un gran porcentaje de los dueños de estas especies terminan por darlas en adopción o abandonarles en el medio natural. Esta última opción es la peor para nuestro medio ambiente, pues algunos de estos animales han empezado a aumentar su proliferación junto a la fauna autóctona.
En un comunicado del Ministerio de Transición Ecológica alertan de que "lo que suele pasar en estos casos es que los dueños de estas mascotas se acaban cansando de ellas o no pueden hacer frente a los cuidados necesarios". En el mismo texto nos alertan de que "en nuestro país algunos centros de acogida se ven ya saturados con ejemplares de estas especies exóticas de los que se deshacen sus propietarios y muchos otros pueden acabar liberados en la naturaleza de forma tanto voluntaria como involuntaria".
Un aviso desde la comunidad científica
El cerdo vietnamita ha comenzado a vivir de manera silvestre en España desde el año 2007. En ese momento ya se habían observado decenas de veces a los pequeños facoqueros campar a sus anchas por nuestro medio natural. A día de hoy la expansión de esta especie se encuentra en expansión.
En el caso de los reptiles, los expertos recomiendan tener controlada la expansión del varano de la sabana o la pitón real. La reproducción indiscriminada de animales como estos puede poner en serios riesgos la cadena trófica. Esto desencadenaría un desastre en la biodiversidad del país.