En época de bajas temperaturas, las infecciones se disparan y, con ello, las visitas al médico. En todo caso, es fundamental que sea un profesional médico quien prescriba la toma de medicamentos ante cualquier enfermedad, especialmente los antibióticos, que deben consumirse tal y como se han prescrito.
Y, si alguien lo dudaba, lo cierto es que los antibióticos también pueden suponer un riesgo añadido para la salud, puesto que no son tan seguros como se podría pensar. En realidad, este tipo de medicamentos incluyen una serie de contraindicaciones a tomar en cuenta.
Por ello y siempre, para ser conscientes de lo que sucede, evitar sorpresas y siempre consumir los antibióticos con cautela, hay una serie de síntomas que también se extienden a la zona genital. Concretamente, la toma de antibióticos también puede afectar al pene.
Antibióticos y síntomas en el pene
Uno de los antibióticos más empleados es la amoxicilina, utilizado para combatir los procesos infecciosos producidos por bacterias. El consumo de este medicamento cuenta con efectos secundarios, entre los que se encuentra la alteración de la flora de los órganos reproductores, que se puede ver debilitada.
Por este motivo, si dicha flora se encuentra alterada, el hongo cándida puede aprovechar la situación para comenzar a reproducirse desconsoladamente y empezar a instalarse con total tranquilidad en el glande y, también, vagina, sin ningún control.
El hongo puede afectar a los hombres en distintas zonas, no solo en el pene, también en la boca, barba o incluso pies. Si afecta a los órganos reproductores, hablamos de balanitis candidiásica, término empleado por los urólogos para referirse a la zona cuando se infecta o inflama y muestra alguno de los síntomas más típicos, como ardor o picor al orinar, glande hinchado con 'pápalas' de color rojo encendido o placas blancas y prepucio que desprende mal olor por las secreciones irregulares que se acumulan bajo la piel.
En todo caso, nunca debemos dejar de tomar un fármaco por nuestra cuenta, y todas las decisiones relacionadas con una medicación deben ser adoptadas con un médico profesional, que nos acompañe en el proceso y pueda resolver cualquier duda que tengamos sobre el medicamento en cuestión.
