El Juzgado de Instrucción número 3 de Valladolid ha decretado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de Lucas Burgueño, que saltó a los medios de comunicación el pasado 29 de septiembre después de que Óscar Puente, ex alcalde de Valladolid, lo denunciara por acosarlo en un AVE.
El joven tuvo que ser detenido al incumplir la orden de alejamiento respecto de sus padres, a los que presuntamente amenazó y trató de extorsionar. Por ello, el juez le prohibió acercarse a ellos a menos de 300 metros, así como establecer comunicación. Sin embargo, el pasado lunes 6 de noviembre rompió la medida.
Según ha relatado sus propios padres, el joven se acercó a ellos en plena calle cuando se encontraban con un amigo para grabarlos con el móvil y volver a amenazarlos. "¡Como me denuncies os corto la cabeza!", les espetó.
"Es evidente que, en el presente caso, las medidas cautelares de protección de la víctima se han mostrado insuficientes para garantizar sus seguridad, ya que el detenido ha quebrantado la medida de alejamiento. Existiendo un riesgo concreto de que si el detenido queda en libertad vuelva a quebrantar la medida actualmente vigente y que pueda atentar contra los bienes jurídicas de las víctimas, dado que repitió la conducta de quebrantamiento en dos ocasiones, a través de llamada telefónica, la primera, y a través del acercamiento personal, la segunda", justifica el auto judicial al que ha tenido acceso Europa Press.
La decisión del juez también se sustenta en los hechos que demuestran "el riesgo de reiteración delictiva" a tenor del historial de Burgueño, que en los últimos cuatro meses ha sido detenido hasta en cinco ocasiones. Primero por un delito de violencia de género, la segunda por delito de atentado y delito de lesiones, la tercera por delito de coacciones y allanamiento de morada, la cuarta por amenazas, daños, extorsión y revelación de secretos en el ámbito de la violencia doméstica y la última, la que ha motivado la presente causa.
Además, el Juzgado de Instrucción 1 tiene otra causa abierta contra Burgueño y otras dos personas por estafa y por un altercado en un establecimiento de hostelería del que se fueron sin abonar lo consumido. En este incidente no llegó a ser detenido.
Así, el Juzgado de Instrucción 3 concluye advirtiendo de que el acercamiento a sus padres por parte de Burgueño puede "entrañar peligro de obstrucción a la Justicia, al no descartarse que pueda responder a su interés en influir en el testimonio que puedan prestar las víctimas, en sede judicial, para el esclarecimiento de los hechos".
El caso de sus padres
Sus familiares acudieron a la comisaría el pasado domingo 29 de octubre para interponer una denuncia por haber difundido un vídeo de su propia madre desnuda después de que estos se negaran a darle dinero. El joven les pedía una cantidad de 80.000 euros. Burgueño también habría amenazado a sus padres con enviar a gente que le ocupara la casa. Además, causó destrozos en el botiquín y en el cable de la caldera de gas, dejándola totalmente inoperativa.
Los agentes pudieron comprobar que el video de su madre hará sido enviado a al menos a seis personas y que la caldera de gas se encontraba inutilizada, por lo que se emitió una orden de búsqueda contra él. Tras su detención, Burgueño pasó a disposición de la Autoridad Judicial, quedando finalmente en libertad con medidas cautelares que ha roto.
