Christian Brueckner, el acusado por la desaparición y asesinato de Madeleine McCann, será juzgado el 16 de febrero de 2024 en Alemania por cinco delitos sexuales, los cuales incluyen tres violaciones. Sin embargo, estos casos son ajenos al crimen que acabó con la vida de la pequeña británica. El pedófilo ha sido acusado en numerosas ocasiones de ser el responsable del secuestro de la pequeña, aunque hasta ahora no se han encontrado suficientes pruebas para incriminarle.
El fiscal Hans Christian Wolters notificó que Brueckner será juzgado por múltiples delitos sexuales en un juicio que se espera que dure hasta tres meses. La defensa del acusado aceptó la fecha de inicio a pesar de haber presentado una demanda contra uno de los testigos clave: Helge Busching.
Busching es el hombre que denunció a Christian Brueckner después de que este le confesara el crimen, además de haber visto vídeos de sus delitos. "Le dije que desde que una niña había desaparecido allí, el lugar estaba repleto de controles policiales También me mostré confundido por no entender cómo una pequeña podía desvanecerse sin dejar rastro"., relató. Entonces, el presunto autor de la desaparición de la niña dijo: "Ella no gritó".
Los cinco delitos por los que será jugado
Tres de ellos están relacionados con menores y entre ellos hay tres violaciones:
Lo primero por lo que se le acusa es por la violación de una mujer estadounidense de entre 50 y 70 años en Portugal entre 2000 y 2006. Luego a una joven irlandesa de 20 años en Praia da Rocha en 2004, además de violar oralmente en su casa a una adolescente en Praia da Luz, entre 2000 y 2006.
En cuanto a las acusaciones que incluyen a menores, las víctimas son una menor de 10 años, a la que sorprendió con otros niños en Faro en 2007 y le obligó a presenciar cómo se masturbaba. La otra víctima es una niña de 11 años, de la que abusó en Sao Bartolomeu de Messines en 2017.
Al año siguiente fue juzgado y declarado culpable de una violación a un hombre de 72 años en Praia da Luz en 2005. Actualmente cumple una pena de siete años de cárcel por ese delito.
En 2020, el fiscal Hans Christian Wolters le señaló como el "único sospechoso" del crimen de Madeleine McCann, por lo que las medidas de precaución aumentaron.
