El Partido Popular tiene el control del Senado al contar con mayoría absoluta en esta Cámara. Así la ha hecho valer para rechazar la pretensión de VOX de iniciar los procedimientos para ilegalizar ERC y Junts. Así, la formación de extrema derecha se ha quedado sola en esta moción que ha contado con sus tres únicos votos favorables frente a 257 en contra.
Paloma Gómez, senadora ultra, ha defendido en el pleno que ERC y Junts son "dos partidos separatistas cuyos lazos con el terrorismo callejero del Tsunami Democràtic o de los Comitès de Defensa de la República (CDR) ha llevado al líder de Junts, el fugado Carles Puigdemont, a estar imputado por terrorismo".
Para defender su postura, VOX alude al artículo 9 de la Ley Orgánica de Partidos Políticos que establece que se ilegalizarán aquellas formaciones que apoyen "políticamente la acción de organizaciones terroristas para la consecución de sus fines de subvertir el orden constitucional o alterar gravemente la paz pública".
"Está en riesgo lo importante, la supervivencia de la nación española, el ordenamiento jurídico y, en definitiva, la convivencia y la igualdad entre los españoles", ha sostenido Gómez, que ha señalado directamente a Pedro Sánchez como "el presidente más traidor que ha tenido España".
Esta moción de VOX pretendía que el PP se posicionase sobre la ilegalización de estos partidos y de esta manera pugnar por liderar la oposición a la ley de amnistía que ya ha iniciado su camino en el Congreso. De la misma manera, la formación ultra intenta patrimonializar las protestas de las últimas semanas por el mismo motivo. "Millones de españoles se han manifestado y se siguen manifestando de forma pacífica en las calles de toda España. ¿Por qué no los escuchan?", ha lanzado Gómez.
La respuesta del PP
Desde el PP han justificado su rechazado en que están al lado del respeto a los "valores constitucionales". "La disolución de un partido político es de las medidas más graves que pueden ser adoptadas en democracia. Señorías, saben que el pluralismo político es un valor superior de nuestro ordenamiento jurídico", ha explicado Yolanda Ibarrola, senadora del PP, quien ha tildado la moción de "innecesaria" pues, ha señalado, aunque prosperara, el Tribunal Supremo la rechazaría.
"¿Por qué traen hoy este debate a la Cámara? Lo traen en busca de un forzado protagonismo, un altavoz que les haga parecer los mayores defensores de España principalmente frente al PP", ha criticado, señalando que VOX "se confunde con su actuación" porque, al final, "a quien termina beneficiando es a Pedro Sánchez y a sus socios". Así, ha pedido a los de Santiago Abascal "responsabilidad, seriedad y contundencia". "No se frena a un Gobierno dispuesto a todo a golpe de nota de prensa, de tuit, o proponiendo lo imposible", ha valorado.
El rechazo de PSOE, Junts y ERC
En el debate, el PSOE ha advertido a Alberto Núñez Feijóo sobre el peligro de la "espiral de odio", por lo que ha pedido al PP que vuelva a la "senda de la democracia y la sensatez". Para los socialistas, es "muy peligroso sostener que España es una dictadura o que van a devolver golpe por golpe", haciendo referencia a las palabras de Isabel Díaz Ayuso. Por ello, ha instado a los populares a poner un cordón sanitario a la extrema derecha.
Por su parte, Junts ha presentado una moción de supresión a la totalidad a la iniciativa de VOX, calificando la propuesta de "ofensa" a los ciudadanos por ser una "apreciación personal más propia de la barra de un bar que del Senado". Josep Lluís Cleries, portavoz de Junts, ha defendido que su partido "nunca ha dado apoyo a ningún acto terrorista", por lo que considera que la moción es "una expresión de odio" hacia unas formaciones políticas "democráticas y pacíficas".
ERC no ha presentado enmiendo alguna a la moción de VOX, pero ha rechazado la iniciativa tildándola de "indigna" al ir en contra de la democracia. "No nos derrotan en las urnas y por eso quieren eliminarnos del mapa político", ha apuntado Sara Bailac, portavoz de la formación independentista en la Cámara Alta.