El acuerdo de Gobierno firmado en Castilla-la Mancha entre PSOE y Podemos no ha sido del agrado de un Partido Popular que, pese a haber ganado las elecciones, se quedó a un escaño de la mayoría absoluta. Ahora ocupa el lugar de la oposición.
La formación conservadora no quiere que el pacto prospere con éxito y la posición que han tomado para ello ha sido muy clara: ejercer una oposición dura, de desgaste y muy agresiva.
La cara más visible de este gesto es la portavoz popular en las Cortes, Ana Guarinos, que ya fue noticia por asegurar que Podemos era un partido lleno de delincuentes y pederastas.
A pesar de las fuertes críticas que recibió por sus palabras, la portavoz popular no quiso retractarse, sino todo lo contrario: la diputada ahondó en su discurso y consiguió boicotear la Comisión de Presupuestos a base de insultar de manera muy agresiva a la formación morada:
En el vídeo publicado por el Periódico de Castilla-la Mancha, la portavoz de la formación conservadora se dedica a repetir (en algunos casos, casi una decena de veces) que Podemos es un partido completamente lleno de "delincuentes, pederastas, gente que asesora a Maduro".
La diputada menciona también algunos de los escándalos que han salpicado a la formación morada, como las becas de Íñigo Errejón o el de José Luis Val, supuestamente condenado por agresión a un Guardia Civil. Se trata de las mismas acusaciones que Podemos ya desmontó cuando las escuchó por parte del portavoz popular en el Congreso, Rafa Hernando.
También tiene un recado para el PSOE: "es una lástima que ustedes hayan decidido rechazar la mano de la moderación y se hayan ido a los brazos de los que apoyan a Maduro en Venezuela".
Bloquear los presupuestos
Este tono bronco tiene dos intenciones claras: situar a Podemos lejos del centro político y, sobre todo, bloquear la aprobación de los presupuestos que permita a Emiliano García Page seguir gobernando la región.
Precisamente el actual acuerdo llegó ante la negativa de Podemos a votar las cuentas que había propuesto el presidente socialista. Ahora que la situación se ha desbloqueado, el PP quiere ejercer una oposición de desgaste, muy lejos de la que tomó cuando Page gobernaba en solitario y la presidenta del PP manchego, María Dolores de Cospedal, se ofreció para aprobar sus cuentas.
El pasado viernes 11 de agosto, el Partido Popular volvió a impedir la votación (tal y como ha sucedido en esta ocasión), con una excusa muy rocambolesca: el presidente de la comisión, Lorenzo Robisco, suspendió la convocatoria porque tenía la intención de "irse de fiesta a su pueblo".
La decisión sorprendió, porque la mayoría de PSOE y Podemos tenían la intención de continuar "incluso hasta la madrugada" si era preciso. No fue posible. Los diputados de la formación morada también criticaron que el presidente les negara la palabra en todo momento.
Mientras tanto, las cuentas continúan bloqueadas a la espera de que la votación pueda desarrollarse con normalidad.