Tras asegurar que el Gobierno "intenta remover el pasado" y contar con frases como "algunos se acuerdan de la fosa de no se quién cuando hay subvenciones"; el líder del PP Pablo Casado ha rectificado la posición de su grupo: dejarán de oponerse a la exhumación de los restos del dictador.
El líder popular ha tomado la decisión de no oponerse públicamente y apostará por mantener a su partido con un perfil bajo durante todo el proceso de exhumación. Es evidente que la formación conservadora no se ha sentido cómoda en los debates sobre este tema.
La reunión en sede parlamentaria que votará esta resolución es una incógnita. Sin embargo, todo apunta a una abstención del PP, que se quedaría solo en el caso de votar en contra porque Ciudadanos también apoyó la proposición no de ley que obligaba a Rajoy a exhumar los restos del dictador en mayo de 2017 (el PP se abstuvo entonces).
Las cartas ya se encuentran sobre la mesa y desde el PP no están ocultando la que, parece, será su posición a partir de ahora. Tanto Pablo Casado, como la vicesecretaria Cuca Gamarra ya han asegurado que "en ningún momento" van a defender a un dictador. Su campo de batalla se centrará en catalogar de 'cortina de humo' esta medida para 'esconder' otro tipo de 'deficiencias' de su Gobierno.
Dificultades
La medida, sin embargo, está encontrando dificultades, entre las que se han encontrado las posiciones de determinados grupos, la familia Franco y un sector minoritario de la Iglesia. Por ello, la norma que el Consejo de Ministros prevé aprobar este viernes cuenta con un blindaje judicial que evite una vuelta atrás.
Como ya hemos comentado, Sánchez actúa bajo el mandato del Congreso. En concreto, bajo la aprobación de una proposición no de ley durante el mandato de Rajoy que contó con 198 votos a favor y ninguno en contra. Sin embargo, el antiguo Ejecutivo hizo caso omiso a aquella norma.
Ahora, el PSOE aprueba la exhumación vía decreto ley e incluirá una modificación de la Ley de Memoria Histórica que evite futuras demandas por parte de la familia de Francisco Franco. La aprobación definitiva se espera para el próximo mes de septiembre, aunque falta elaborar una hoja de ruta que incluya el traslado y lugar en el que se enterrarán los restos del dictador en el caso de que la familia se niegue a hacerse cargo de ellos.
A falta de conocer el contenido de la propuesta
Las críticas a la decisión de Sánchez se están centrando en el desconocimiento de la propuesta. Todo parece apuntar a que se desvelarán durante el Consejo de Ministros que se celebrará este viernes, en el que se debería aprobar el texto concreto que incluiría todos los detalles pormenorizados.
Podemos ya ha mostrado su apoyo sin fisuras a la normativa y la consideran "urgente porque cada día que Franco permanece enterrado junto a sus víctimas, es un día más de verguenza para los españoles".
Ciudadanos asegura que esperará a conocer la propuesta al completo y espera que se plantee "una solución global". Sin embargo, ya han anunciado que votarán a favor si el texto reproduce íntegramente la resolución aprobada en 2017.
