España está viviendo un año especialmente lluvioso, con tasas de acumulación muy superiores a los ejercicios previos, en los que se llegó a aplicar una política de restricciones en el uso de agua por los problemas de sequía en nuestro país.
Las lluvias continuadas han incluido una Dana de consecuencias devastadoras y varias borrascas de alto impacto, que han sido bautizadas como Jana, Konrad y Laurence. Y no se espera que la situación vaya a cambiar repentinamente durante esta semana.
De forma paralela, mientras España vive unos episodios de lluvias prácticamente inéditos, otros puntos que habitualmente enfrentan períodos generalizados de precipitaciones se están viendo en la situación inversa. Se trata de lugares situado a latitudes más elevadas, como Reino Unido, Alemania o Europa Central, con cielos mucho más despejados y una situación también diferente a la habitual.
La explicación tras las lluvias que afectan a España
Este contraste entre norte y sur de Europa tiene una explicación. Detrás de las lluvias que afectan a España se encuentra una configuración atmosférica que desvía las borrascas que habitualmente cruzan por Reino Unido hacia el sur de Europa, incluyendo nuestro país.
El fenómeno se explica por un "anticiclón de bloqueo" muy persistente que se ha instalado en las islas británicas, según ha explicado el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo. Este fenómeno provoca que las borrascas se vean obligadas a tomar otra dirección y se están desplazando hacia la península ibérica para continuar sus trayecto.
Los anticiclones son sistemas de altas presiones atmosféricas, que tienen como característica principal el tiempo estable y los cielos despejados. Se suelen instalar en la zona más meridional del Viejo Continente, pero cuando lo hacen a latitudes más altas, en las que habitualmente circulan las borrascas, cortan el paso de las lluvias.
Por este motivo, las borrascas se ven obligadas a cambiar su dirección y buscar otra trayectoria para continuar. Por este motivo, "no tienen más remedio que bajar de latitud para circular y hacen un pasillo que pilla de lleno a la Península Ibérica", según ha explicado el portavoz de la Aemet.
Esto provoca que las lluvias irrumpan por el oeste de la Península Ibérica y dejen mucha lluvia en España, sobre todo en el sur o la zona de los Pirineos. Además, también se ven afectadas otras zonas similares, como Italia o Córcega. Un escenario que se extiende durante semanas porque no cambia el plano metereológico, permitiendo la constante irrupción de borrascas atlánticas en lugares donde no eran habituales.
Por el momento, no se espera que la situación vaya a cambiar. A pesar de que se espera una pequeña tregua este miércoles, 19 de marzo, el contexto de lluvias generalizadas se repetirá en todo el país durante el resto de semana, con menor incidencia en el área mediterránea e Islas Baleares.
Es pronto para conocer cómo será la situación durante las próximas semanas, ante la llegada de abril, pero por el momento la Aemet apunta a una gran probabilidad de continuar con precipitaciones en gran parte del país porque la Península Ibérica continuaría bajo la influencia de las borrascas atlánticas.