Hace apenas un par de días el sol reflejaba en las aceras y quemaba como el mismísimo azufre del infierno, y hoy Madrid parece estar preparándose para su segunda Edad de Hielo. El verano es delicioso, efímero y volátil, como un paquete de galletas de chocolate. Pero siempre nos deja recuerdos como un bonito amor estival, atardeceres frente al mar o ese maratón en una sola noche de la última serie de Netflix.
En 2016 esta estación no iba a ser menos y nos ha regalado momentos maravillosos. Cómo olvidar esa traumática canción del verano que nadie había pedido o ciertos vídeos cursis que se han convertido en demasiado virales como para poder huir de ellos. Por eso hemos recopilado algunas de las razones por las que, de una forma u otra, este ha sido el verano más mágico de todos. Para bien o para mal.
1 Porque Orlando Bloom por fin es pillado desnudo y la imagen que se filtra está censurada con un rectángulo negro
El sentimiento al descubrir esa franja negra que cubría parte de la desnuda anatomía de Orlando Bloom fue parecido al sentimiento de morder una barrita de cereales y descubrir que el chocolate en realidad eran pasas. Una total decepción. Y encima con algo tan antiestético como un rectángulo negro. Luego, claro, y gracias a la magia de Internet, no fue difícil descubrir el pastel. Pero el desencanto inicial no nos lo quita nadie.
2 Porque hemos tenido canción del verano y ha sido de Leticia Sabater
Concretamente 'La Salchipapa'. O al menos eso de "baile del verano" es lo que repetía en su estribillo, o en sus estrofas o en lo que quiera que sea ese Frankenstein musical. Vamos, maravilloso. Una delicia para nuestro verano, que nos pillaba aún a las puertas, con el bikini a medio atar. Aún estamos decidiendo si nos mola más la canción o el esperpéntico videoclip.
3 Porque seguimos sin gobierno y nos toca volver a participar en la fiesta de la democracia
A todos nos gustan las fiestas, claro que sí. Solo que en esta Rajoy ha saboteado el ponche, Albert Rivera se ha liado con dos tías en la misma noche, Garzón está vomitando en el baño mientras Pablo Iglesias le recoge el pelo, Pedro Sánchez está llorando porque creía que iba a ser coronado rey del baile de primavera y Rosa Díez ha huido por la puerta trasera.
4 Porque hemos aprendido una nueva palabra: 'miísima'
Y con ella, cuál es el nivel máximo de pegajosidad que puede llegar a alcanzar una persona. Es lo que nos dejaba el vídeo que le dedicó Risto a su novia, Laura Escanes, en el que al principio no parecía estar muy claro si estaba recreando un anuncio de Don Algodón o uno del pack de sábanas del Carrefour. Todo muy suyísimo.
5 Porque hemos cogido a Pikachu. A Pikachu y una insolación
Y de regalo, batería desgastada, ojos rojos y golpes de calor por pasar demasiado tiempo en el Retiro, sin sombra, a la espera de un ansiado Snorlax que ha dormido más que tú esta última semana. Asumámoslo: cogimos el nuevo juego de 'Pokémon' con muchas ganas, pero no las suficientes como para compensar los paseos bajo el sol a las 4 de la tarde, los golpes contra farolas y árboles o la pérdida de dignidad al andar en círculos en mitad de la calle.
6 Porque han vuelto los Juegos Olímpicos y la culpabilidad
No teníamos bastante con los que cada verano se van a hacer surf, windsurf, kitesurf y demás deportes que acaban en 'surf' y en los que hay que moverse demasiado. Son personas que te miran ceñudas cuando les dices que tu mayor ejercicio en verano ha sido levantarte del sofá a por el mando a distancia. Por si con esto fuera poco, este verano hemos tenido en nuestras pantallas a semidioses con patas elásticas, fuerza sobrehumana y velocidad de curvatura. La guinda de la autoestima a un verano perfecto.
7 Porque Bisbal y Chenoa no han vuelto
Nuestra OTP se ha reunido durante la grabación del documental que está preparando TVE por el XV aniversario de la primera edición de Operación Triunfo. Hay incluso una foto de ellos dos juntos después de 11 años, pero no, Chenoa y Bisbal siguen sin volver. Falsas esperanzas que han roto los corazones de los fans.