Existe un medicamento que puede frenar el contagio del VIH llamado Profilaxis Preexposición (PrEP) al virus. Su funcionamiento es sencillo: se suministra en pastillas y puede evitar que una persona seronegativa contraiga la enfermedad. Pese a que varios estudios han avalado su uso y las probabilidades de protección alcanzan casi el 100% (si se toma una dosis de manera diaria), España todavía no ha legalizado este medicamento.
La Unión Europea (UE) sí ha avanzado en la legalización de la PrEP. En julio de 2016, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) elaboró un informe favorable a su uso. Y en agosto del mismo año, la UE dio un gran paso positivo convirtiendo este fármaco en legal. Países como Francia, Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Reino Unido o Portugal ya facilitan a sus ciudadanos el acceso a la PrEP. El laboratorio Gilead es el encargado de producir Truvada, el nombre comercial de esta pastilla.
¿Es realmente efectiva la PrEP?
La eficacia de este tratamiento es elevada. Tomar PrEP no es una cuestión de "libertinaje", como afirman sus detractores. El medicamento cumple con la función de poner el freno al VIH entre aquellas personas que son menos propensas a utilizar preservativos. Además, su medicación conlleva una vigilancia médica y la realización de análisis cada tres meses y el porcentaje de protección es casi del 100%.
Con respecto otras enfermedades de transmisión sexual, los sanitarios aseguran que durante el proceso en el que realizan el seguimiento del tratamiento de preexposición, también se informa a los ciudadanos sobre las prácticas más saludables durante las relaciones sexuales y se advierten sobre otras ETS, destacando y recomendando el uso de preservativos.
¿Cómo se toma la PrEP?
Este tratamiento es voluntario y de forma temporal, es decir, no se debe tomar de por vida si los hábitos sexuales cambian (por ejemplo, utilizando preservativos). Existen varias formas de tomar este medicamento en función de la actividad sexual y de si se practica sexo anal o sexo vaginal.
Solo tomando una dosis diaria siempre el paciente se asegura de que el medicamento le proteja casi al 100% y no contraiga el VIH. En el hipotético caso de que se olvide alguna vez tomarlo, sus efectos se reducirían considerablemente. Los estudios de Estados Unidos (iPrEx) y Reino Unido (PROUD) que avalan este medicamento se realizaron con personas que utilizaron una píldora al día.
Sin embargo, la PrEP se puede tomar también de otras maneras. En cuanto al sexo vaginal, se requieren un mínimo de seis píldoras por semana para que se proteja adecuadamente el cuerpo frente al virus. En cuanto al sexo anal, la pastilla se puede tomar una vez al día o "según eventos" (nunca para el sexo vaginal), esto es, encuentros sexuales de los que se tengan constancia que existe el riesgo de contagio.
En este método, son necesarias dos pastillas el día antes de practicar sexo sin protección; una dosis justo después de mantener la relación sexual y otra más al día siguiente. Con este procedimiento (que solo puede realizarse para el sexo anal), el ensayo Ipergay ha probado la efectividad del fármaco. Sin embargo, cabe destacar y recordar que solo la toma diaria de la dosis durante los siete días de la semana podrá asegurar la protección casi al 100%.
El fármaco debe ser siempre recetado por un profesional sanitario con experiencia en tratar con personas que estén infectadas con VIH.
¿Es posible adquirir PrEP en España pese a que no sea legal?
La posibilidad es algo real. De hecho BCN Checkpoint, la principal clínica de diagnósticos de VIH en Cataluña, asegura que alrededor de 1.500 personas se encuentran tomando PrEP de manera irregular e ilegal en la comunidad. Es posible acceder a ellas en el mercado negro o mediante ingeniería burocrática y aduanera. Sin embargo, la fiabilidad de estos medicamentos no está garantizada al 100%.
¿Tiene efectos secundarios la PrEP?
Los principales efectos secundarios que puede causar este medicamento son náuseas o malestar estomacal. Sin embargo, estos síntomas aparecen durante el primer mes (no en todas las personas) y se van disipando con el paso del tiempo. Por ahora, ningún estudio ha determinado efectos secundarios graves. Es por ello que durante el tratamiento de la PrEP, los sanitarios realizan un seguimiento del paciente.
Si he tenido relaciones sexuales de riesgo, ¿puedo tomar PrEP?
Existe la Profilaxis Post-Exposición (PPE), un medicamento de 28 días de duración que es administrado a las personas que hayan tenido relaxiones sexuales de riesgo.
Se pueden adquirir en las urgencias hospitalarias previo examen y análisis de los doctores. Este fármaco solo debe ser solicitado en casos extremos, no para su uso como prevención. La Seguridad Social cubre su gasto.
Su efectividad se limita a las 72 horas posteriores al suceso, esto es, los tres días siguientes a las prácticas de riesgo, aunque a medida que pasan las horas se va reduciendo la efectividad real.
España, a la cola de Europa
Dentro de este grupo de países vanguardistas que aprueban el uso de la PrEP, también se encuentran Estados Unidos, Australia, Canadá, Israel, Kenia o Perú. En Tailandia y Brasil se encuentra disponible para algunas personas determinadas a través de ensayos clínicos. Los estudios realizados en el país norteamericano así como por los británicos afirman que el uso de esta pastilla reduce el riesgo en más de un 90%, alcanzando el 99% si se toma una dosis diaria siempre.
Con estos datos, cabe preguntarte: ¿Por qué España no ha legalizado un medicamento que puede poner freno al contagio de VIH y más cuando esta enfermedad se encuentra en auge en los últimos años? Fuentes del Ministerio de Sanidad se excusan bajo el pretexto de que cualquier fármaco aprobado debe pasar por la Comisión de Precios de los Medicamentos, un órgano poco transparente que no avanza en este sentido.
Sanidad niega que se encuentre paralizada en el proceso de legalización de este medicamento que se ha comprobado que funciona y aseguran que se están llevando a cabo los protocolos "adecuados". El ministerio ha dejado este proceso de investigación en manos del Plan Nacional del Sida.
Dentro de estos protocolos se encuentra la realización de un estudio con 400 voluntarios en Cataluña y el País Vasco (Madrid y Andalucía rechazaron participar pese a que en el caso de la Comunidad madrileña los casos por nuevos contagios hayan brotado en los últimos años). Este estudio no influirá en la legalización, pero probablemente la utilización de la PrEP no se apruebe hasta que se finalice.
La legalización definitiva de este medicamento resulta necesaria para la salud de los españoles y las asociaciones que luchan contra el VIH y el SIDA como Apoyo Positivo lamentan el retraso en este sentido.
Algunos activistas creen que esta demora se debe al miedo existente en el Ministerio de Sanidad promover y aprobar una medida "impopular" debido a que sus detractores no creen que la PrEP deba ser sostenida por el sistema público.
Sin embargo, pese a los altos costes de este medicamento (entre 500 y 800 euros por persona al mes, aunque no son cifras confirmadas en España puesto que todavía no es legal) su uso se reduciría a determinados grupos de la sociedad, entre las que destacan las personas que pueden estar más expuestas a tener relaciones sexuales de riesgo. El beneficio para toda la sociedad, al final, sería más elevado que los costes presupuestarios.