No hay ninguna novedad en destacar una de las principales diferencias en la fonética hispana entre Latinoamérica y España. Mientras que en el país ibérico se registra un sonido característico para las letras 'C' y 'Z'; en América Latina tiene el mismo sonido que la 'S'.
¿Cuál es el motivo? Lo cierto es que se trata de una pregunta que ha ocupado a especialistas e hispanohablantes, intrigados por el motivo que ha llevado a esta diferencia tan característica en los dialectos entre ambos territorios.
Hay algunas teorías, aunque la mayoría han sido descartadas y se da credibilidad a una en concreto. Entre los descartes, que el habla diferente del español surgió por un pequeño mestizaje con las lenguas indígenas, algo que se creyó entre finales del siglo XIX y comienzos del XX. Esta teoría indigenista o 'sustrática' tuvo como padre al lingüista alemán naturalizado chileno, Rodolfo Lenz, pero ha perdido fuerza.
La teoría que se ha impuesto con mayor aceptación es que la pronunciación diferente de la 'Z' y la 'C' no surgió en América Latina, sino que directamente no embarcó hasta el continente y se llegó con este tipo de habla.
Sevilla
En el momento en el que se produjo la colonización de América, ya había dos modos de hablar castellano. Uno con mayor influencia en el norte de Castilla, también impuesto en Madrid; y otro diferente en el sur de España, sobre todo en Sevilla.
En la actual capital andaluza la 'Z' y la 'C' ya se pronunciaban de modo similar a la 'S', es decir, existía el seseo. Allí, en Sevilla, estuvo la principal cabecera de enlace con América, el Puerto de Indias. Cabe destacar que una mayoría relativa de los primeros colonizadores españoles que llegaron a América provenía de Sevilla y otras partes de Andalucía: un 37% entre 1493 y 1539, según estudios del historiador estadounidense Peter Boy-Bowman.
Con todo ello, Juan Sánchez Méndez, autor del libro 'Historia de la lengua española en América', sostiene en declaraciones a BBC: "En toda América triunfó la manera sevillana de hablar español. Mientras que en la ortografía es la manera de Madrid, que es donde estaba la Corte, el rey, los nobles y por tanto tenía mucho prestigio". Cabe destacar que Sevilla era una ciudad en la que pasaban temporadas quienes aguardaban para embarcar hacia América, por lo que el seseo ya era dominante antes de partir.
A pesar de todo, también se tiene en cuenta otra teoría: que los colonizadores pudiera unificar fonemas para simplificar el español a los indígenas que aprendían el español. En este caso, no se descarta del todo que las personas originarias del continente también tuvieran relación en este cambio.
Sea como fuere, el seseo se considera correcto y no hay una forma más correcta que otra en la pronunciación de la 'C' y la 'Z'. A pesar de que en el siglo XIX hubo intentos en las tierras americanas que se independizaban por distinguir la pronunciación de la 'S', 'C' y 'Z', bajo el argumento de que contribuiría a escribir con menos faltas de ortografía, finalmente no cuajaron. La norma culta en América es el seseo y se acepta por todos los organismos.