El nadador chino Zhanle Pan dio la sorpresa en natación y se llevó el oro en la prueba de 100 metros libres con un tiempo que rompió el récord mundial, en concreto, 46,40 tardo en llegar el nadador a la meta.
No obstante, su marca se está cuestionando por posible dopaje. El nadador, de 19 años, terminó por delante del australiano Kyle Chalmers y el rumano David Popovici.
El pasado mes de abril se descubrió que 23 nadadores dieron positivo en sustancias incompatibles con la máxima competición y que, aunque la WADA (Agencia Mundial Antidopaje) estaba al tanto, más de la mitad de ellos pudieron participar en Tokio. Al final, China ganó seis medallas, cuatro oros y alegó contaminación alimenticia.
No ha dudado en decirlo
Ahora, el exatleta australiano y entrenador del subcampeón en la actualidad, considera fuera de lo común el tiempo de Pan Zhanle en los 100 metros y no ha dudado en decirlo.
"Estudié este deporte durante treinta años y esa velocidad no es real. No se puede ganar a un grupo así con una ventaja así en esa piscina. Están los mejores de la historia. Es humanamente imposible", aseguró en un vídeo publicado en sus redes sociales.
Su testimonio no ha tardado en hacerse viral, y la sombra sobre el dopaje vuelve a asomar sobre China.
Kylie Chambers, subcampeón olímpico que es entrenado por Brett Hawke, quita hierro al asunto y rechaza cualquier hipótesis de que Zhanle hubiera consumido sustancias ilegales: "Tengo confianza en él. Creo que hizo todo lo posible para estar aquí y por eso merece la medalla de oro", dijo Chambers.
Aunque en China han levantado la voz para defender a su nadador, ahora mismo parece un oro cuestionado.