La Etzaintza ha conseguido evitar un suicidio colectivo internacional pactado a través de internet, en el que se encontraba una ciudadana de nacionalidad española. El operativo llega tras la colaboración entre cuerpos de seguridad de varios países.
Uno de ellos ha sido Argentina, donde se encontraba el inductor del suicidio, un joven de 17 años que había conseguido el compromiso de sus víctimas para perpetrar las muertes antes de final de año.
Sin embargo, el joven consiguió convencer a sus seguidores para adelantar la tragedia al 17 de agosto, fecha en la que llegaba la efeméride de la muerte de una persona allegada.
En la vivienda del detenido se encontraron cuchillos y varios cutters con los que ya estaba preparando su propia muerte, así con varias gasas ensangrentadas. Los agentes también se han incautado de ingente material informático que actualmente está siendo investigado.
La joven española, de Guipúzcoa, ya ha sido derivada a la unidad de salud mental para evitar que pueda consumar el acto al que se había comprometido. Igual suerte ha tenido el líder argentino.
Las investigaciones se centran ahora en encontrar la posible existencia de otros grupos que pudieran estar liderados por el joven y que podrían cometer un suicidio inminente ante la ausencia de la persona que estaba guiando sus actos.
Investigaciones
La Ertzaina consigui´o parar la tragedia cuando, vía Interpol, se puso en contacto con las autoridades argentinas para detener, seis días antes de la fecha prevista, este suicidio colectivo. El joven fue localizado en la ciudad de San José, en la provincia de Entre Ríos.
La colaboración entre las instituciones implicadas, sirvió para analizar los rastros dejados por el grupo a través de las redes y remitir solicitudes de información a los diversos operadores de internet. La disposición de las empresas fue completa en todo momento.
Los agentes también han podido llegar a la conclusión de que el juego simula el conocido 'juego' de la 'Ballena Azul', aunque en este caso no existen fases progresivas en las que poco a poco se deriva a la persona hacia un desenlace fatal.
En este caso, el inductor consiguió desde el primer momento ganarse la confianza de sus seguidores y convencerles de cometer el suicidio de todos desde el primer momento. Ahora toda la acción de las autoridades se centra en localizar a más personas implicadas y evitar sus muertes.
