Podemos ha anunciado el lanzamiento del 'Tramabús', un vehículo con el que pretenden recorrer toda España para denunciar públicamente la corrupción que ha azotado a nuestro país durante los últimos años.
El vehículo, al que se podrán subir los ciudadanos que así lo deseen, estará decorado con varias caricaturas en representación de Rodrigo Rato, Luis Bárcenas, José María Aznar, Felipe González, Eduardo Inda o Esperanza Aguirre. Además, el color azul que aparece alrededor de todos ellos recuerda, casualmente, al empleado por la formación conservadora. En el vehículo hay espacio también para empresarios y dueños de grandes grupos de comunicación.
Con dicho autobús, Podemos espera recorrer toda España para denunciar lo que ellos consideran una 'trama'. A la presentación de la campaña, y a bordo del autocar, estarán presentes el líder de Podemos, Pablo Iglesias, la portavoz parlamentaria Irene Montero y el sociólogo y escritor Rubén Juste. Esta misma semana del 17 de abril espera comenzar su recorrido por Madrid.
Con el autocar tienen previsto recorrer los núcleos financieros de la capital, como la sede del Partido Popular en la Calle Génova, el complejo de las Cuatro Torres -sede de grande empresas- o el Paseo de la Castellana, centro financiero de la capital.
La campaña recuerda sorprendentemente a la lanzada recientemente por la asociación ultracatólica Hazte Oír, aunque se aleja enormemente de su finalidad, puesto que en este caso busca denunciar la corrupción y no fomentar el odio hacia los menores de edad. En el autocar no ha faltado alguna alusión a la citada campaña, con un toque de ironía.
"Durante años la trama nos ha hecho salir a las calles. Ahora la haremos salir a ella", ha relatado el líder de la formación morada. Mientras tanto, la campaña ha tenido una fuerte repercusión en redes sociales, donde ha cosechado bastantes comentarios positivos.
La trama
En noviembre de 2015, el diputado Manolo Monereo y el doctor en Derecho Héctor Illueca publicaron en Cuartopoder un artículo titulado 'La Trama'. En él denunciaban el supuesto conflicto de intereses que vivían algunas de las grandes empresas del país con la clase política para, supuestamente, "mantener unos privilegios a costa de que la mayor parte de la población soportase el coste de dichos privilegios".
En el artículo, sus autores ponían en cuestión el discurso de "la casta" con el siguiente argumento: "Podemos ha popularizado el término casta. Es parte de la verdad, pero no es toda la verdad. Tiene tres problemas graves esa formulación. El primero, que oculta el enorme poder que tienen hoy los grupos económicos dominantes; los políticos son casta en la medida en que cada evz son más subalternos a los poderes del capital. El segundo, la corrupción es el sistema: los que no se presentan a las elecciones mandan por y a través de la corrupción; el problema estña en los corruptores y no solo en los corruptos. Tercero, el poner solo la atención en los 'políicos' sitúa los problemas en los procedimientos y no en lso contenidos de la democracia, lo que puede favorecer y favorece una visión transformista 'a lo Renzi'".
Pablo Iglesias publicaba posteriormente en Facebook su visión de todo ello. Confirmando su acuerdo con las palabras de sus compañeros, consideraba que el actual modelo "había fracasado"
El secretario general de Podemos, consideraba que la trama "nunca se había visto tan amenazada", puesto que "la irrupción de Podemos y sus aliados y la cuestión nacional catalana han removido buena parte de las bases insititucionales sobre las que la trama creció y se desarrolló". Algo que, al parecer, se ha intensificado por la creciente inestabilidad internacional.
Por todo ello, el líder de Podemos considera que hay que intensificar una acción parlamentaria "vinculada a una actividad de relación permanente con la saociedad civil, distinta, que es la que necesita España", tal y como relató en una entrevista en El Diario.