El Partido Popular parece que ha entendido a la perfección lo que quiere decir que España "necesita un Podemos de derechas". ¿Y eso qué es? Un partido que cree ilusión pero que defienda las políticas neoliberales. Hasta ahí iba todo bien para Ciudadanos, pero últimamente parece que se le está torciendo la estrategia.
Desde que la formación de Pablo Iglesias irrumpiera en el panorama político ha recibido todo tipo de críticas y acusaciones, pero lo cierto es que muchos de los mensajes, consignas e incluso medidas de Podemos están 'inspirando' a todos los partidos sin excepción (con casos más notables como el del PSOE, cuyo programa intenta parecerse sospechosamente al de los morados). Al PP ya le hemos visto copiar algunas formas, como colocar caras jóvenes frente a los medios de comunicación o presumir de transparencia... aunque solo sea durante la campaña electoral, por supuesto.
1 Iconografía, transparencia y apuesta social
Aparte del logo, el Partido Popular ha copiado una serie de formas en el mensaje, en su relación con los medios de comunicación y en el uso que ahora hacen de las redes sociales. Lo más destacado últimamente es la apertura de la página web corporativa para recibir propuestas de cara al programa electoral, como hiciera Podemos desde su nacimiento en Plaza Podemos.
No es una novedad desde que surgió Podemos la estrategia de todos los partidos, en especial el PP, por aparentar transparencia, aunque de manera continua lo torpedeen de cara al público. Las medidas de apuesta social y el populismo -porque no pretenden cumplirlas- entran en sus programas como un florero que guste a propios y extraños, como ocurre con la regeneración de la que por dentro ningún partido tradicional hace gala. Tan solo aparecen como respuesta al interés de la sociedad en una nueva forma de hacer y pedir las cosas.
Una de las nuevas fórmulas empleadas por el PP fue el nombramiento de su cartel de jóvenes vicesecretarios para dar la cara por los infinitos casos de corrupción de los veteranos. Esto, sin embargo, lejos de funcionar por la copia a las caras jóvenes de los nuevos partidos, está provocando un enfrentamiento abierto entre los sectores más corruptos del partido contra estas voces críticas internas, así como entre las bases, ya que están los que opinan que no es una buena estrategia quemar las caras con más potencial de futuro en el partido sacándoles a diario a hacer frente a la corrupción y los escándalos ajenos.
2 Política fiscal
El Partido Popular no se cansa de abanderar la lucha contra los altos impuestos y acaba de prometer, como siempre en campaña, una bajada de hasta 2 puntos en el IRPF. Es un mensaje que coincide con los lanzados desde la izquierda alternativa al PSOE, pero adolece de defectos en la forma y en el fondo. Para empezar es una medida que no tiene absolutamente ninguna coherencia con su argumentario ni su práctica experiencia política. El Partido Popular subió más de 40 veces los impuestos solo en la primera mitad de su última legislatura, siendo el partido que más veces ha aplicado subidas fiscales en la historia española.
Además, la bajada ha sido tachada por economistas como regresiva, no es redistributiva porque acumula descensos porcentuales y es más beneficiosa cuanto más alta sea la renta. Por eso hay que distinguir la copia del original. Podemos y, sobre todo Izquierda Unida, llevan toda la vida hablando de una reforma progresiva que se encargue de que los pobres sean los más beneficiados en las bajadas impositivas sobre la renta, como indica el sentido común. Por último, cabe señalar el afán liberal en subir impuestos que no distinguen la renta de las personas y son más dolosos e injustos para clases bajas, como el IVA, mientras que acostumbran a bajar los impuestos dependientes de renta.
3 Economía
Unidos Podemos es muy crítico con la política 'austericida' del gobierno del PP, servil con la troika. Para evitarla pugna por el tiempo establecido con la Unión Europea para reducir el déficit y por tanto por el ritmo de recortes que se debe llevar. La izquierda busca retrasar el objetivo de déficit uno o dos años para evitar que los ajustes sean tan agresivos como practica el PP y argumenta que Francia y Alemania lo han incumplido sistemáticamente. Ya no hablan de impago sino de reestructuración de la deuda. Sin embargo, el Gobierno del Partido Popular nos ha llevado a una situación de incumplimiento del déficit, copiando en cierto modo a Unidos Podemos en su decisión sin renunciar al 'austericidio' mencionado, por lo que sus políticas de contención del gasto han resultado infructuosas.
Además, la UE podría multarnos por la decisión de Rajoy de no contener el gasto aún más durante el año electoral -ahora se entiende-. La multa por incumplimiento del objetivo de déficit podría llegar a los 2.000 millones de euros y los recortes que heredaría el próximo gobierno serían de unos 8.000 millones de euros más. No obstante, la decisión de la multa la han dejado para después de las elecciones, por si acaso perjudicara al PP que los ciudadanos vieran las consecuencias de sus actos. La deuda no ha descendido lo más mínimo, por el contrario ha aumentado hasta superar el 100% del PIB (1,081 billones de euros de deuda). Y creciendo.