Es el momento de actuar con seriedad. Siéntense, esto le va a interesar. Seguramente al leer el titular de esta noticia, muchos habrán pensado en la chorrada que puede suponer vincular la piña al bello arte del amar y ser amado. Pues bien, todo esto tiene una lógica más aplastante de la que crees. ¿No os ha pasado alguna vez que, con vuestra pareja, amigo o amiga (con derecho al amor) o un rollete de una noche de altas expactativas, al llegar al momento de pasar a la acción, algo os ha echado para atrás? No seré yo quién responda a esta pregunta.
Según un estudio de la Universiad de Lyon, todo esto puede deberse al olor desagradable que muchos y muchas desprenden. Algunos, incluso sin quererlo o merecerlo. Es la genética y la naturaleza de cada uno, por lo que en muchos casos no tiene por qué ver con higiene -en otros muchos sí-.
La piña, esa vieja aliada
Pero, como no todos los superhéroes llevan capa, esta universidad ha dado con la solución a estos problemas que tantos quebraderos de cabeza le han dado a los amantes del cariño más íntimo. Según dicha institución, hay alimentos que pueden paliar todo lo desagradable de la práctica del sexo oral. Muchas veces se ha hablado de que el sabor o calidad e los fluidos del ser humano puede variar según la alimentación que se siga. Y en esto han incidido en Francia.
La piña es lo único que necesitamos para jugar mejor. Esta frutita es pura magia. De incluirla en tu dieta, esos fluidos de sabor amargo se endulzarán. Insistimos en que puede parecer una chorrada pero... ¿cuántas veces se habrá cortado el rollo con estas cosas? Lyon está ayudando al ser humano de la mejor de las formas. Y más de uno que diga en alto que esto es una chorrada, irá diez minutos después a comprar piña, eso seguro.
Pero esto no queda solo en los fluidos corporales. De hecho, el consumo de piña un poco antes de tener esa esperada cita que llevabas semanas esperando puede ayudarte. Y es que la piña ayuda a que la lengua tome un tacto más aspero que puede ayudar. Imagínense a lo que nos referimos.
Sin embargo, hay algunos alimentos que ayudan a todo lo contrario y que pueden hacer que tu cama se convierta en un lecho solitario, sin más. Y que todos huyan de ti. Mucho cuidado. Alimentos como la cebolla, las especias o el café son el gran enemigo de nuestros fluidos corporales. Pero, hay algo aún peor. Y es el tabaco. Todos ellos, combinados, pueden convertirte en una pequeña mofeta que no podrá tener amor. Así que, ya sabéis. Lyon nos has guiado en el camino.
