La invasión de Rusia a Ucrania continúa y con ella el cruce de acusaciones entre ambos países. El presidente ruso, Vladimir Putin, ha acusado a Ucrania de estar trabajando en un programa secreto de armas biológicas cerca de las fronteras rusas para el que estaría contando con la ayuda de Estados Unidos, según asegura Rusia.
Por su parte, tanto Ucrania como Estados Unidos han desmentido esta información y aseguran que Rusia podría estar utilizándolo como pretexto para ser ellos mismos los que utilicen armas químicas o biológicas en el conflicto abierto entre los dos países.
Lo que sí se sabe que es que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha aconsejado a Ucrania destruir todos los patógenos peligrosos que guardaba en sus laboratorios de salud pública ya que, como muchos otros países, Ucrania tiene laboratorios en los que se investiga cómo mitigar las amenazas de enfermedades peligrosas que afectan tanto a seres humanos como a animales, incluida entre ellas el coronavirus.
"Como parte de este trabajo, la OMS ha recomendado encarecidamente al Ministerio de Salud de Ucrania y otros organismos responsables para destruir los patógenos de alta amenaza para evitar posibles derrames", ha asegurado la agencia dependiente de la ONU.
¿Por qué se aconseja su destrucción?
La destrucción de estos patógenos viene motivada por el bombardeo que han sufrido las ciudades ucranianas por parte de las tropas rusas durante las dos últimas semanas. Con ello, ha aumentado el riesgo de que se produzca un escape de patógenos que sea causante de enfermedades, algo que se podría producir si por ejemplo alguno de los bombardeos destruye algunas de las instalaciones donde se guardan.
En este sentido, la agencia Reuters ha preguntado a la OMS cuál era su trabajo en Ucrania antes y después de que se iniciara la invasión rusa y estos han asegurado que el organismo había colaborado con el país durante varios años para promover la seguridad y prevenir la liberación accidental o deliberada de patógenos.
Aun así, la OMS no ha dado ningún detalle más sobre qué tipo de patógenos o toxinas estaban alojadas en los laboratorios ucranianos ni cuándo había mandado la recomendación de destruirlas. Tampoco decidió responder a las preguntas sobre si finalmente el gobierno ucraniano ha decidido seguir sus recomendaciones.
Fue el pasado viernes cuando Rusia afirmó, sin aportar ninguna prueba, que Ucrania tenía armas biológicas en sus laboratorios con la ayuda de Estados Unidos. Desde Washington han advertido que las reiteradas acusaciones de Rusia hacia Ucrania podrían ser utilizadas como pretexto por el Kremlin para desplegar sus propias armas químicas o biológicas.