Ni el casting de parejas, ni los espectaculares paisajes por los que viajan, ni las entrañables familias que los acogen, ni los divertidos conductores que les llevan de un lado a otro. Si hay algo que le da esa magia y emoción a 'Pekín Express' es el hecho de que la audiencia no interviene en la expulsión de los concursantes (y que dure mucho) y todo se reduce a la tarjeta que contenga el temido sobre negro.
Sin embargo, como contrapartida muchas veces hay parejas que tienen mala suerte en una etapa concreta y acaban abandonando el concurso, a pesar de dar mucho juego y ser queridas por el público. Por ello y tras 6 ediciones del programa emitidas y 59 parejas participantes, va siendo hora de que la productora se ponga manos a la obra y rescate a algunas joyas televisivas que cayeron injustamente en el olvido y nos encantaría volver a ver compitiendo en la carrera. Esta es nuestra propuesta para un 'Pekín Express: All Stars'.
1 Ainhoa e Idoia, las gemelas
Cuando Ainhoa e Idoia participaron en la primera edición del programa, allá por 2008, el rol de los gemelos había sido escasas veces explotado en los realities españoles, pero cumplieron y con creces las expectativas. Su fuerte carácter les hacía darlo todo por el concurso y mostrar un feroz espíritu competitivo, además de protagonizar sonadas discusiones que siempre acababan con un tierno abrazo. Tras 10 etapas, tuvieron que abandonar la carrera a las puertas de China porque Idoia sufrió un brote del cáncer que pensaba haber superado. Desde entonces, hemos esperado sin éxito verlas en algún 'Supervivientes' o en el formato VIP de Cuatro, 'Expedición Imposible', aunque los vascos han podido disfrutar de Ainhoa en la última edición de 'El Conquistador del Fin del Mundo'.
2 Javier y Martha, jefe y criada
Personalmente mis favoritos de 'Pekín Express 1'. Una pareja totalmente dispar, formada por un acomodado joven de 19 años y su empleada doméstica colombiana de 33. Las diferencias entre ambos eran más que evidentes y al acabar el concurso no se podían ni ver, pero aún así consiguieron llegar a la final en Pekín y quedar en un segundo puesto por detrás de los ganadores Fernando y María, pareja que luego rompería su relación, quizás por lo llamativa que resultaba la piel de Martha en Asia. Cómo olvidar aquellas flores que recibió de manos de un ruso con el que se quería casar o la tensa situación que provocó Javier cuando pudo elegir a varios compañeros para que llamasen a casa y se le 'olvidó' regalarle tal privilegio a su pareja.
3 Juanan y Tony, drag queens
El casting de la primera edición fue oro y no podemos olvidar una imprescindible tercera pareja: Juanan y Tony, amigos y drag queens. Sin duda, los concursantes más divertidos de su año, por no decir de todos los que han pasado por el formato. Juanan y Tony no tuvieron ningún reparo en desafiar a la homófoba Rusia y calzarse sus pelucas y tacones en medio del transiberiano o en casa de unas simpáticas señoras que los acogieron precisamente por ser homosexuales, ya que, de lo contrario, no querían meter a hombres en casa. Frases como "en Rusia no hay más que dientes de oro y váteres de mierda" o su particular estilo al hacer autostop con canción y baile incorporados ("ruso, para el coche; coche, para el ruso") los convierten en perfectos candidatos para volver a la carrera y mejorar el injusto sexto puesto en el que quedaron.
4 Meritxell y Alazne, madre e hija
La segunda edición llegó con un casting mucho menos brillante (con parejas a las que les encantaba recorrer las etapas en pandilla, como si fuera una excursión del colegio) pero con una gran joya: Alazne, de 21 años. La joven sacó de quicio a todos sus compañeros por su arrollador carácter, incluyendo a su madre, y llegó a provocar a la catalana Silvia hasta el punto de que le propinó la bofetada más famosa de la historia televisiva reciente al son de "un poquito de educaciooó-". No obstante, tuvieron oportunidad de reconciliarse en una de esas imprescindibles etapas de intercambio de parejas e incluso le debieron su cuarto puesto en la clasificación cuando Carles y Silvia abandonaron por una lesión física de él, dejando una plaza vacante en la carrera.
Más tarde, Alazne sería de los pocos 'pekineros' en probar suerte en televisión y fue colaboradora de 'Lo que diga la rubia', el magazine de Luján Argüelles que duró dos telediarios.
5 Carla y Miriam, desconocidas
Concursar siendo la pareja de desconocidos supone el obstáculo añadido de tener que conocer y seguramente soportar a alguien por el que no tienes ningún tipo de apego, pero en el caso de Carla y Miriam se convirtió en una bonita relación que robó el corazón de muchos espectadores. Posiblemente las desconocidas que mejor se hayan llevado, resultó muy frustrante ver que, con las ganas que le ponían al juego, eran eliminadas por un traspiés en la etapa especial de la gymkana en Hong Kong. Las jóvenes se despidieron entre lágrimas, representando el espíritu de competición e ilusión que queremos ver en todo concursante de esa experiencia vital en la que se convierte 'Pekín Express'.
6 Sonia y Menchu, las rubias
La segunda edición con Raquel Sánchez Silva al frente nos llevó por una apasionante ruta a lo largo de Vietnam, Camboya, Laos, Tailandia e Indonesia que pocas parejas disfrutaron como Sonia y Menchu, la pintoresca pareja de rubias, cuarentonas y solteras -y a mucha honra-. Al igual que las desconocidas, las amigas fueron de esos concursantes que se van y dejan a medio gas toda su ilusión, tal y como demostraron cuando gozaron del privilegio de recorrer el templo de Angkor Wat. Precisamente por las ganas de disfrutar al máximo a cada minuto cogieron tanta tirria a Engracia y Manuel, los 'rústicos' de la edición, que estaban igual de felices en su Moral de Calatrava natal que recorriendo la bahía de Ha-Long. Sin embargo, las rubias tuvieron que conformarse con un séptimo puesto frente al cuarto de los agricultores.
7 Manolo y Marta, padre e hija
Aunque particularmente no era un gran fan del padre y la hija de 'Pekín Express 3', hay que reconocer que se ganaron el apoyo de gran parte de los espectadores, que vieron con frustración cómo quedaban en segundo lugar a pesar de haber ido en cabeza durante toda la etapa final de Bali y tener en su poder la mayoría de amuletos. Protagonizaron uno de los momentos más entrañables del concurso cuando, en Tailandia, acabaron en Kanchanaburi, donde se encuentra 'el puente sobre el río Kwai', la película favorita del abuelo de la familia. Gracias a su memoria y acompañados de una simpática conductora consiguieron el pase al último país, Indonesia.
8 Sandra y Belinda, hermanas ganadoras
Y mientras padre e hija se quedaban sin la gloria definitiva, Sandra y Belinda ganaban la Ruta del Dragón. Su victoria se vio envuelta por la polémica de haber tenido suerte en el último juego de la final y de su comentada repesca. 'PE 3' escondía una etapa sorpresa en la que la eliminación del sobre rojo era falsa y tenían que superar una misión: si conseguían entrar en el pódium de la siguiente etapa sin que los otros concursantes las vieran y les arrebataran unos escudos de dragón fijados en sus mochilas, regresarían al concurso. Sandra y Belinda, en su papel de fugitivas, fueron descubiertas por las demás parejas pero mantuvieron en su poder los escudos gracias a cubrir sus mochilas con unos sacos, por lo que su repesca fue tachada de tramposa. Participar en una versión All Stars les permitiría revalidar su título y demostrar que, en efecto, eran dignas merecedoras del triunfo.
9 David y Cuqui, casados
El cambio de continente, de presentador y de grupo televisivo no le sentó demasiado bien al programa que, agravado por un casting mediocre, se despidió de Cuatro con una edición para olvidar. No obstante, el matrimonio granadino formado por David y Cuqui acabó ganándose a la audiencia, que maldijo su clasificación como cuartos. La que se presentaba como una friki absoluta de Michael Jackson y su marido llegaron a sacrificar su cabello y accedieron a rapárselo con tal de continuar en la carrera, anécdota que palidece si recordamos cuando antepusieron la salud de un niño que se encontraron en la calle antes que su puesto en la clasificación.
10 María del Amor y Yareli, las canarias
El cambio a Antena 3 sí que le vino bien a 'Pekín Express'. Cuando nadie esperaba una nueva edición, el formato regresó con uno de los mejores castings de la historia, quizás por lo igualado que era y por la ausencia de la típica pareja de machitos que todo lo ganan. Las protagonistas indiscutibles fueron María del Amor y Yareli, las explosivas canarias que rozaron el triunfo tras conseguir anteponerse a sus continuas discusiones. Frases como "Lorea, levanta la pata y mea" o su baja destreza con las sumas y restas ("todo lo hago con calculadora, yo no hago nada mentalmente") hicieron que los espectadores estén deseando verlas en cualquier otro programa, a poder ser en una edición de exconcursantes.
11 José Luis y Manuel, los gemelos
Aunque eran difíciles de soportar, los gemelos estuvieron a la altura de Ainhoa e Idoia en lo relativo a protagonismo. Con tan solo 19 años y recién salidos de su Badajoz, escandalizaron a la audiencia con sus fuertes discusiones y sus continuos gestos de inmadurez, con episodios en los que, llorando, se negaban a dormir en las casas que les ofrecían los locales. Faltaría saber si estarían dispuestos a volver a las condiciones del concurso para superar su quinto puesto en la clasificación, tras ser eliminados en la primera etapa de Malasia, pero nosotros estaríamos deseando verlos perder los papeles en una prueba de inmunidad como aquella en la que uno de ellos tenía que remar a ciegas siguiendo las indicaciones de su hermano.
+1 Las hermanas Abradelo
Y si nos ponemos a pedir, por qué olvidarnos de María y Romy Abradelo, participantes en la única edición de 'Expedición Imposible', la versión VIP del reality road realizada en Marruecos. Las hermanas consiguieron desquiciar a todos los participantes para deleite de la audiencia, que vivió al borde del sofá su repesca frustrada. Normal, por otro lado, si te dedicas a sacar de sus casillas a los otros concursantes a golpe de canciones y bailes y a no ir de tu color, algo que enfadó a Leticia Sabater: "de momento yo voy de fucsia que es mi color, porque ellas van de fucsia y su color es el rosa pastel". Una pareja muy intensita que no nos importaría volverla a ver en la carretera.