La actitud del Gobierno de Pedro Sánchez con respecto al conflicto catalán siempre ha sido muy criticada. Pero la premisa de tan sólo responder a acciones y no a palabras ha cambiado tras las declaraciones de Quim Torra y su referencia al conflicto bélico independentista de Eslovenia.
"Hay palabras y palabras" afirma un miembro del Gobierno. Y es que la tensión es palpable, pues se añaden las acciones del Comité de Defensa de la República (CDR) que cortaron la autopista AP-7 frente a la pasividad de los Mossos d'Esquadra.
Torra, presidente de la Generalitat, criticó anteriormente los actos de los Mossos contra los grupos radicales, lo cual propició las inacciones del cuerpo frente a los CDR. En esta "dejación de funciones" se centra el Gobierno para comenzar a intervenir en Cataluña, aunque la vicepresidenta Carmen Calvo deja el artículo 155 como "última medida".
A pesar de las críticas, el Ejecutivo recuerda que "nunca han dejado de actuar" y ya han recurrido al Tribunal Constitucional dos resoluciones del Parlamento de Cataluña. Ahora, además, la número dos del Ejecutivo afirma que la "inhibición" de los cuerpos de seguridad es "inadmisible" y se van "a tomar medidas en el marco de sus competencias". También afirma que la "frivolidad" de las palabras de Torra han cruzado "en terreno especulativo una línea de irresponsabilidad absoluta. Una línea literalmente inaceptable".
"A Sánchez no le va a temblar la mano como no le tembló el año pasado"
La pasividad de los Mossos "no se puede tolerar", por lo que la máxima preocupación del Gobierno es la gestión de la Policía de la Generalitat para "garantizar la seguridad y la convivencia". Pedro Sánchez ha evitado pronunciarse al respecto y no será hasta su comparecencia en el Congreso el 12 de diciembre cuando se hable de las consecuencias de las palabras de Torra y las acciones de los Mossos que la cúpula del PSOE ya critica.
La portavoz del Comité Electoral del partido, Esther Peña, no cierra la puerta a que el Presidente del Gobierno incluya el artículo 155 como una medida: "No le va a templar la mano como no le tembló en el pasado".
Algunos ministros descartan el artículo 155
De momento las medidas que el Gobierno ha llevado a cabo son tres cartas que se han enviado a la Generalitat. La más dura ha sido la del ministro de Interior Fernando Grande-Marlaska al consejero de Interior de la Generalitat, Miquel Buch. En ella se hace hincapié en la ley que contempla "los supuestos de actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado cuando lo estimen las autoridades estatales".
Por su parte, el ministro de Exteriores Josep Borrell, quien en ocasiones ha hablado de la escasa respuesta frente al independentismo, descarta el artículo 155 al contrario que algunos de sus compañeros de partido. Aunque critica a Torra por "un lenguaje que parece que esté llamando a una insurrección" no piensa en usar el 155 porque "lo que cuentan son las acciones".
Otro de los ministros abala las palabras de Borrell y afirma que no están "en el 155 en estos momentos", sino que están centrados en la Ley de Seguridad Nacional que Sánchez puede aplicar sin ayuda del PP, al contrario que con el artículo 155.