La cumbre del Ministerio de Justicia, celebrada en septiembre de 2018, comenzó a mostrar un futuro halagüeño para la Ley de Memoria Histórica. En un contexto en el que la Transición está muy presente con la exhumación de Franco en pleno debate, los partidos han dado un paso hacia delante y han llegado a un consenso para que el Estado trabaje en la excavación de las fosas comunes del franquismo.
PP, PSOE, Ciudadanos, Podemos y los nacionalistas concuerdan en que el Gobierno debe participar en estas labores de exhumación y reconocimiento de los 114.000 cadáveres que dejó la Guerra Civil y la dictadura. Para ello, un grupo de gestores y técnicos de diferentes comunidades autónomas estuvieron presentes en la reunión en la que, tal y como cuenta uno de los participantes a El Español, había muchas "ganas de trabajar".
El PP es uno de los partidos más reacios a estas labores de excavación. Aún así, fuentes del partido confirman que la "sensibilidad" de la nueva dirección de Pablo Casado es mayor con respecto a otros líderes populares anteriores y "seguirán trabajando para sellar ese consenso". Buena prueba de ello es el presidente popular de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, quien ya ha comenzado a subvencionar las excavaciones de su región.
Los populares también confirman que están trabajando en su propia Ley de la Concordia donde participa activamente Adolfo Suárez Illana, hijo del expresidente del Gobierno: "Concretaremos nuestra postura en los próximos meses". El político popular afirma que si Pablo Casado cambiara su postura y se negara a que el Estado trabajara en las labores de excavación, estaría contradiciendo las decisiones de los dirigentes populares autonómicos.
Un proceso de cuatro años
Si el Gobierno aprueba este consenso, estaría cumpliendo con las peticiones de la ONU. "Ojalá lo consigamos. Es un reto muy bonito. Debemos avanzar sin tirarnos los muertos a la cabeza", afirman representantes de PP y PSOE.
Este acuerdo está planteado por la Dirección General para la Memoria Histórica del Gobierno socialista en un plan de cuatro años: "El objetivo es detectar y excavar todas las fosas antes de que transcurran cuatro años (...) Sigamos o no en Moncloa, esta Dirección General ya estará en marcha y sería muy raro que alguien la detuviera".
Francisco Etxeberría, antropólogo forense y exhumador de Mola y Sanjurjo en Pamplona, ha sido el elegido por el Gobierno español para este "plan cuatrienal" de excavación de las fosas comunes. El doctor, que lleva trabajando en estas labores desde el año 2000 y ya ha recuperado casi 8.000 esqueletos, confirma a El Español que cree que el Estado tiene una "volundad honesta" de participar en estos trabajos.
La aprobación de los Presupuestos planteados por el Gobierno significaría un importante avance de cara a estos trabajos de detección de cuerpos. En el caso de que no se pudieran sacar adelante, la prórroga de las anteriores cuentas haría posible que el Gobierno reordenara la dotación económica dedicada a la Dirección General de la Memoria Histórica. Esto sigue siendo positivo, aunque no tanto como si se aprobaran los nuevos Presupuestos.