David Koenig, de 33 años, y Ellen O'Meara, de 30, parece que tenían una profunda depresión que los ha llevado a quitarse la vida. Estos músicos se suicidaron el pasado 17 de enero en una habitación de hotel de Nueva York y dejaron una nota con propina para el empleado o empleada del servicio de limpieza que los encontrara.
Con la intención de no alarmar a los trabajadores, antes de suicidarse colgaron una sábana enfrente de la puerta para tapar la macabra escena que se encontrarían en la habitación. También habían dejado 20 dólares junto a un papel colgado avisando de lo que se encontrarían: "No mires detrás de la cortina. Estamos muertos. Esto es para ti".
Man and woman in double suicide at New York hotel, left tip for housekeeper who discovered bodies https://t.co/M1HdTqXM5Zpic.twitter.com/PSUJLIsrkk
— Celebsrumor (@celebsrumor5) 20 de enero de 2019
La empleada que entró a la habitación, ignorando la nota, corrió la sábana y se encontró a la pareja acostada boca arriba en la cama con una bolsa transparente en la cabeza y dos tubos de plástico conectados a un par de cilindros rojos.
La pareja no quería causar molestias
La Policía contó a New York Post que la pareja había utilizado óxido nitroso, el famoso 'gas de la risa', para inhalarlo dentro de las bolsas y así encontrar una muerte silenciosa. Este gas no es mortal en pequeñas dosis, pero su consumo excesivo puede dejar al cuerpo sin oxígeno, produce desmayos, ataques al corazón y caída de la presión arterial.
Además, las autoridades afirman que bajo la cama se encontraba el libro 'Suicidio e intento de suicidio: métodos y consecuencias', por lo que asumen que la pareja tenía planificada meticulosamente su muerte desde hace tiempo.