Con pasaporte europeo uno está acostumbrado a viajar con relativa facilidad. Dentro de Europa tan solo es necesario el DNI y en la mayoría del mundo basta con rellenar un pequeño formulario en el aeropuerto u obtener un visado mediante trámites relativamente sencillos, sin embargo, hay algunos países a los que pueden ser una auténtica odisea a la hora de viajar, a algunos es prácticamente imposible. Estos son algunos de los ejemplos más llamativos.
1 Corea del Norte
Famoso por ser uno de los países más cerrados, militarizados y oscuros del mundo. El régimen tirano comandado por Kim Jong-un probablemente se lleve la palma en cuanto a poner trabas a quien quiera darse un paseíllo por el país. Obtener el visado es una auténtica lotería y solo unas pocas agencias gestionan las visas, guiadas por las directrices políticas del régimen. Además generalmente tan solo se puede acceder desde China (en épocas de menos tensión militar han exisitido tours desde corea del sur) y por supuesto la visita está absolutamente controlada por responsables del gobierno que no permiten ver más allá de lo que ellos quieren, prohíben totalmente la mayoría de dispositivos electrónicos, las cámaras con zoom de más de 3 aumentos, etc.
2 Myanmar
Otra de las dictaduras más tiranas de Asia. Hasta hace poco obtener el visado para visitar este país era casi una utopía y menos de 2 millones de personas lograban visitar cada año esta perla del sudeste-asiático. Ahora la junta militar que lleva gobernando el país más de 50 años intenta abrirse un poco más al turismo, sin embargo sigue teniendo la característica de que todas sus fronteras terrestres están cerradas, por lo que la única manera de acceder al país es en avión. Además tiene la fama de ser un lugar bastante caro para el turista y con bastantes difilcutades para moverse por el interior. Aún así, se puede visitar por libre y sin estar en el punto de mira del gobierno, como pasa en Corea del Norte.
3 Somalia
Probablemente hay que tener muchas ganas de riesgo para viajar a este país. Uno de los estados, más bien un conjunto de estados casi anárquicos y controlados por guerrillas militares, que está en el top de los más peligrosos para viajar del planeta. Con muchas áreas totalmente cerradas al turismo las partes que si se pueden visitar del país, casi exclusivamente Mogadiscio y algunas playas del norte, son una auténtica pesadilla a la hora de descubrir a que institución hay que dirigirse para obtener la visa, y una auténtica temeridad si se intenta pasearse por libre.
4 Siria
Aunque Siria cuenta (o contaba) con un inmenso catálogo de patrimonios de la humanidad y de maravillas naturales, desde que estalló la guerra civil allá por 2011 el país se ha vetado totalmente al viajero. Practicamente todos los gobiernos del mundo prohíben o recomiendan muy encarecidamente no viajar allí. Quien haya estado en Israel tiene que tener además en cuenta que está totalmente prohibida la entrada al país a quien tenga un sello israelita en el pasaporte y, para el que no, debe tener en cuenta que: no solo es que el gobierno recomiende no visitar el país, sino que las embajadas europeas piden encarecidamente abandonarlo.
5 Liberia
100 euros de visado, 4 vacunas, riesgo de Ébola y violencia residual de una guerra que destrozo uno de los países más explotados por occidente por su riqueza en diamantes. No es que la frontera de Liberia esté cerrada, pero sin duda es un país muy desaconsejable para unas vacaciones, y quien viaje allí seguramente encuentre un universo de dificultades que pasan, sobre todo, por su grave estado sanitario y su profunda crisis humanitaria. Mismos problemas que son extrapolables a Sierra Leona o Guinea Conakry.
6 Islas Pitcairn
Aquí no hay problemas de guerras ni enfermedades, pero sin duda no será fácil viajar al que es uno de los archipiélagos más aislados del planeta. Territorio británico de ultramar, estas islas que no tienen aeropuerto y su único acceso es por vía marítima. Perdidas en medio del pacífico no existen rutas convencionales para llegar, ni hoteles, aún así los apenas 100 turistas que consiguen acceder a este paraíso inexplorado cada año aseguran que merece la pena hacer el esfuerzo de encontrar un barco que vaya desde Nueva Zelanda pasando por allí y conseguir quedarse en las casas de alguno de sus apenas ¡100 habitantes!
7 La Antártida
Aunque son muchos los intrépidos que consiguen viajar al gran continente helado no es ni mucho menos un juego de niños. Aunque no hay problemas de visados y demás lo cierto es que hay pocas maneras de llegar. Lo más común es hacerlo en cruceros que suelen ser bastante caros desde la ciudad de Ushuaia en lo más profundo de la Patagonia argentina, por lo que lo primero sería plantearse llegar hasta allí. También entran en las dificultades del viaje el llevar el equipo adecuado para soportar las gélidas temperaturas y asegurarse de tener un buen seguro de viaje. En cualquier caso, es una opción solo para los bolsillos que estén dispuestos a desembolsar al menos unos miles de euros para disfrutar del frio extremo.
