Los miembros de 'La Manada de Castelldefels' continúan en prisión, desde el pasado 22 de diciembre, después de la declaración de la víctima número 1 ante la titular del Juzgado de Instrucción número 1 ante la titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Gavà.
Los acusados se han integrado bien a la vida en la cárcel, aunque no suelen hacer vida en común con el resto de los reclusos. Además, tienen intención de organizar un torneo de pádel en la cárcel de Brians 1, donde se encuentran encarcelados, según avanza La Vanguardia.
Además, allí ya han recibido las visitas de sus familiares y, al menos en un caso, también de su novia. Dos de ellos se encuentran en el módulo 4, de reclusos de confianza y que son poco conflictivos en la cárcel. Otros tres se encuentran en el módulo 5, donde gozan de un régimen de especial protección.
El torneo de pádel ha surgido desde el grupo y es idea de Alejandro Raúl P.C., conocido como 'el Cubano'. De esta forma, quieren reunirse todos juntos por primera vez todos desde que están en la cárcel, algo que no sucede desde la investigación, como se desprende de los mensajes de WhatsApp que intercambiaron para concretar una versión conjunta.
Los acusados siguen las informaciones que se publican y se quejan de que la prensa solo destaca las informaciones que no les benefician judicialmente. Los Mossos d'escuadra insisten en que esas pruebas supuestamente beneficiosas para ellos no son casuales. Los detenidos, señalan los agentes, "borraron o alteraron" contenidos del chat en el que se encontraban "con la presunta finalidad de interferir en la correcta investigación". Mientras tanto, mantuvieron o recuperaron mensajes para avalar que los encuentros fueron consentidos, el eje de la defensa. Hay tres denunciantes.
Investigación
El auto de prisión se dictó por las agresiones supuestamente infligidas a las víctimas número 2 y 3. Este miércoles ha declarado ante la juez la víctima 1, que fue la primera en acudir a denunciar los hechos, en noviembre de 2021.
La denuncia de esta mujer puso sobre aviso a los ahora acusados, que en un primer momento se alertaron y después relajaron al comprobar que la policía no les detenía por la acción de esta denunciante.
Las diligencias previas desprenden que es la denunciante con un relato más inconcreto. La juez ha ratificado que fue violada en un de sus tres encuentros con los sospechosos. La mujer, sin embargo, ha exonerado de toda culpa a uno dee los detenidos, José Miguel M.M., que trabaja como repartidor, aunque esto no tendrá efectos prácticos por el momento.
Este investigado, como los otros cuatro, fueron a prisión por las acusaciones de las otras dos víctimas, la número 2 y 3. Las conclusiones de la unidad de investigación de los Mossos de Gavà con respecto a ellas son contundentes: "Se sobrepasaron los límites de lo que se pueden considerar relaciones sexuales consentidas", explicó.