Vuelco político tras la condición marcada de Pedro Sánchez para formar un gobierno de coalición con Podemos. Después de que el presidente del Gobierno en funciones marcase como línea roja la entrada de Pablo Iglesias al ejecutivo, Podemos ha aceptado y el líder de los morados ha anunciado que renuncia a formar parte del Consejo de Ministros.
"El PSOE dice que el único escollo que evita ese gobierno soy yo. He estado reflexionando en estos días y no voy a ser la excusa para que el PSOE evite ese gobierno de coalición", ha explicado Pablo Iglesias a través de un vídeo publicado en Twitter. De esta manera, desde Podemos lanzan la pelota al tejado de los socialistas, a quienes emplazan a iniciar las negociaciones.
"Mi presencia en el Consejo de Ministros no va a ser el problema siempre y cuando el PSOE asuma que no puede haber más vetos y que la presencia de Unidas Podemos en el próximo Gobierno tiene que ser proporcional a los votos, así como que la propuesta lógicamente la va a hacer Unidas Podemos", ha anunciado Iglesas.
No debo ser la excusa del PSOE para que no haya un gobierno de coalición de izquierdas. Estar o no en el Consejo de Ministros no será un problema siempre y cuando no haya más vetos y la presencia de Unidas Podemos en el Gobierno sea proporcional a los votos pic.twitter.com/UcBoukAj7H
— Pablo Iglesias (@Pablo_Iglesias_) 19 de julio de 2019
¿Y ahora qué?
La decisión de Pablo Iglesias se produce en un contexto en el que tanto el PSOE como el Gobierno habían realizado una última oferta a Unidas Podemos: aceptaban cualquier miembro de su formación en el Gobierno, excepto a Iglesias. Este movimiento también pretende evidenciar si los socialistas quieren, de verdad, un Ejecutivo de coalición.
El grupo confederal espera que con este paso se desbloquee la situación política y que el PSOE comience una negociación integral con ellos durante el fin de semana. Sánchez podría así ser investido la próxima semana. Unidas Podemos lleva pidiendo desde las elecciones generales que se acuerde un programa y los equipos de gobierno.
Los socialistas no han emitido todavía ninguna respuesta ante la renuncia de Iglesias. Sin embargo, si no dan un giro en su discurso, ambas formaciones deberían llegar a un acuerdo 'in extremis' durante estos días. Ambas formaciones tendrían que negociar en cuatro días un pacto programático: