De nuevo, ha vuelto a ocurrir en Madrid. Un operario de limpieza de 58 años ha ingresado en el Hospital 12 de Octubre tras desplomarse por un golpe de calor mientras limpiaba en la calle Algete, en el distrito de Arganzuela, a las 17 horas de la tarde. Esta vez, las consecuencias no han sido tan dramáticas, como sucedió el pasado viernes con José Manuel González, de 60 años, que perdió la vida mientras limpiaba en el distrito de Puente de Vallecas.
Los sindicatos pidieron en junio que el Ayuntamiento flexibilizara los turnos para evitar riesgos, algo que el Consistorio permitió de una manera mínima y que las empresas finalmente no implementaron. La portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, Carolina Alonso, ha denunciado la situación en redes sociales:
??Desde junio Comité de Empresa y Empresa han tenido reuniones con Borja Carabante Concejal y Delegado del Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad, para hacer frente a las olas de calor respetando la salud de los trabajadores de la limpieza de Madrid (@AlmeidaPP_ lo sabe).
— Carolina Alonso (@Carolalon1) July 16, 2022
Ahora, sí se ha optado por esa medida que el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, ha anunciado en su perfil de Twitter.
La desgraciada muerte que vivimos el pasado sábado no se puede volver a permitir. Por eso hemos instado a la firma de un acuerdo entre patronal y sindicatos para establecer unas condiciones especiales en ola de calor.
— José Luis Martínez-Almeida (@AlmeidaPP_) July 19, 2022
Gracias a todos por haberlo hecho posible. pic.twitter.com/17AUmu5Elr
Al menos 14 trabajadores de limpieza en Madrid han sufrido mareos solo durante el fin de semana, según cifra el sindicato UGT, en declaraciones al diario El País. El Ayuntamiento privatiza la limpieza, es decir, no la gestiona directamente y la divide en seis lotes, que se reparten entre seis empresas que gestionan los 21 distritos de la capital.
Nuevas condiciones
El nuevo acuerdo alcanzado entre sindicatos y empresas adjudicatarias suprime los trabajos de mayor esfuerzo, el barrido manual, en los turnos de tarde, cuando se dan episodios de altas temperaturas, es decir, cuando el mercurio supera los 39ºC.
Además, la empresa adjudicataria se compromete a mejorar la calidad de la ropa que visten los empleados, que hasta la fecha era de poliéster. "No sabía que el uniforme era de poliéster", era el argumento del alcalde, que en una entrevista con la Cadena SER llegó a afirmar que no tenía constancia de cómo vestían sus propios empleados de limpieza a 40ºC en verano. Además, se flexibilizarán los cambios de turno.
En el pacto, se dejan tres escenarios ligados a los niveles de alertas de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet): verde, amarillo y naranja.
Con el nivel verde se mantienen las recomendaciones normales para hacer frente al calor: utilizar gorra y crema solar, mantener la hidratación, alimentarse con comidas frescas y adaptar las rutas para priorizar las zonas más frescas en las horas de más calor.
Con alerta amarilla (más de 36ºC) se suprimirán, en el turno de tarde, servicios como el desbroce o el uso de sopladoras de gasoil y se priorizará el uso de vehículos con aire acondicionado; cuando se use un vehículo sin aire acondicionado, los operarios podrán parar 10 minutos cada hora y media para refrescarse.
Con alerta naranja (más de 39ºC) quedarán suprimidos, en el turno de tarde, todos los trabajos de mayor esfuerzo (como el barrido manual), quedando operativos los servicios que se hagan desde un vehículo; además, los operarios tendrán que ir como mínimo en parejas, nunca solos.