Oriol Junqueras no está dispuesto, por ahora, a ceder del todo en los recursos donde pide la excarcelación. El exvicepresident ha solicitado por segunda vez su puesta en libertad aludiendo a los mismos argumentos esgrimidos en su primera apelación. En aquella ocasión, reconocía la aplicación del artículo 155, lo asumía y aseguraba que no se encontraba ejerciendo ningún puesto en la administración. El exmandatario no renunció ni renuncia ahora expresamente a la vía unilateral.
Esta nueva apelación la ha solicitado a la Sección Segunda de la Audiencia Nacional, un tribunal encargado de reexaminar las decisiones de la juez Carmen Lamela. Sin embargo, este órgano siempre suele ratificar las resoluciones de la misma, por lo que es poco probable -aunque no imposible- que Junqueras y el resto de exconsellers queden en libertad.
Los miembros del exGovern tienen una puerta abierta para salir de prisión. El Tribunal Supremo liberó bajo fianza a los componentes de la mesa del Parlament así como a su presidenta, Carme Forcadell, tras asumir el 155 y limitar la DUI a "algo simbólico". En este caso, Forcadell no renunció a la unilateralidad, pero acató la legalidad y solo pasó una noche en la cárcel tras pagar 150.000 euros de fianza.
La vía Forcadell
Junqueras y los siete exconsellers encarcelados de manera preventiva tienen la posibilidad de quedar en libertad si utilizan la "vía Forcadell". Esto es, acatan la Constitución -la legalidad-; rechazan la vía unilateral y desisten en la reiteración del incumplimiento del ordenamiento jurídico.
Sin embargo, Junqueras, pese a que acata el 155, no rechaza la vía unilateral en el segundo recurso presentado ante la sala de la Audiencia Nacional:
"Tras la aprobación de las resoluciones de aplicación del artículo 155 se ha procedido en Cataluña a la disolución del Parlamento con el objetivo, que comparte mi mandante, de participación en el proceso electoral fijado por el Gobierno de España (...) El Gobierno catalán no se ha reunido desde el día de su cese, no se han adoptado acuerdos de Gobierno ni se han efectuado publicaciones en el boletín oficial que demuestren actos ejecutivos tras la sesión parlamentaria del día 27 de octubre", alude en el recurso.
Junqueras también ha remarcado que estar en prisión atenta contra su derecho a la participación política puesto que se presenta a las elecciones autonómicas convocadas por Rajoy para el próximo 21 de diciembre en Cataluña. Asimismo, el exvicepresident asume que la DUI fue algo simbólico, "de carácter político y no jurídico", algo que ya la propia Forcadell reconoció en su día.
Pese a la presentación de este nuevo recurso, los exmiembros del Govern cesado no esperan que la Audiencia Nacional les apruebe su excarcelamiento. Sí tienen esperanzas en el Tribunal Supremo, la instancia judicial que aprobó la libertad bajo fianza de Forcadell y los miembros de la mesa del Parlament tras acatar la legalidad, pese a que la misma presidenta no renunciara expresamente a la unilateralidad. Una estrategia que está siendo calcada por Junqueras.
Acatan el 155
El periodo electoral ya se ha puesto en marcha y con esta etapa los movimientos de las diferentes formaciones políticas, incluso desde la cárcel. Los exconsellers de la Generalitat, Josep Rull y Jordi Turull, han acatado la aplicación del artículo 155 en Cataluña pese a que discrepen con su puesta en marcha sin promover ningún tipo de resistencia.
Asimismo, los exmiembros mencionados aluden que se presentarán a las elecciones del 21-D y por ello solicitan a la Audiencia Nacional su puesta en libertad inmediata. La defensa asegura que no existe riesgo de reiteración delictiva. Además, aseguran expresamente que no tienen ningúna intención de fugarse, como hicieran Puigdemont y otros cuatro exconsellers.
Por su parte, Joaquim Forn, el exconsellers de Interior, ha seguido los pasos de sus compañeros para solicitar su excarcelamiento. La defensa afirma que su cliente acata el 155 y tiene intención de presentarse a los comicios de diciembre. El abogado, Daniel Pérez-Esqué, ha solicitado a la sala de la Audiencia Nacional que revoque así la sentencia de Lamela tras asumir la legalidad, no ostentar ningún cargo y no existir riesgo de reiteración delictiva ni de fuga.