El auge de la extrema derecha ya no es algo que vemos desde lejos por el resto de Europa, es algo que ha sucedido en España. El hartazgo con la clase política y los conflictos nacionalistas han dado alas a un discurso populista y de odio que, por desgracia, ha sido avalado por otras fuerzas políticas sellando acuerdos y pactos de gobierno. VOX ha entrado por la puerta grande
Y la formación ultraderechista ha colocado en su objetivo a los sectores más vulnerables de la sociedad. Los inmigrantes, el feminismo y el colectivo LGTBI son los tres grandes enemigos de los de Santiago Abascal, a los que dirigen todos sus ataques pretendiendo recortarles derechos y libertades. No lo conseguirán.
El pasado mes de julio tuvo lugar la tradicional marcha del Orgullo LGTBI, de especial relevancia esgte 2019 al tratarse del 50 aniversario de los disturbios de Stonewall Inn que dieron comienzo al movimiento de liberación del colectivo. Además, adquirió mayor valor reivindicativo después de la entrada de VOX al Congreso de los diputados y de los pactos alcanzados con PP y Ciudadanos en Andalucía (que después se repetirían en otras Comunidades Autónomas).
Después de las ideas de VOX de esconder el Orgullo en la Casa de Campo e incluso de amenazar con prohibirlo, el mayor espectáculo lo dio Ciudadanos. Los naranjas no fueron invitados de manera oficial por los organizadores debido a sus pactos con la extrema derecha. Podían asistir a título personal, sin carroza y sin encabezar la marcha celebrada el sábado 6 de julio. Y así lo hicieron, con una pancarta que, lejos de reivindicar cualquier demanda del colectivo LGTBI, subrayaba su presencia en la manifestación de la que se creyeron protagonistas.
Tras los abucheos y después de retrasar durante horas la marcha, Ciudadanos la abandonó tras conseguir hacerse la foto. Con ello, denunciaron presuntas agresiones criminalizando de esta manera al colectivo al que dieron la espalda desde el momento en el que pactaron con la extrema derecha. Sin embargo, tal y como reza el famoso lema antifascista: "No pasarán".
El 21 de septiembre, ni un paso atrás
El colectivo LGTBI ha querido organizarse de nuevo para celebrar una nueva marcha reivindicativa para dejar claro que se va a permitir ni un retroceso en los derechos y libertades conquistados. "Orgullo frente al fascismo: siempre adelante, nuestros derechos no se pactan", es el lema elegido para la manifestación que tendrá lugar el próximo sábado 21 de septiembre.
"La manifestación surge como respuesta a los ataques directos que la extrema derecha ha llevado a cabo contra el colectivo LGTBIQ a través de declaraciones públicas y propuestas políticas concretas. También quiere condenar la actitud de aquellas fuerzas políticas que pactan nuestra discriminación y persecución", reza el manifiesto, que también denuncia las agresiones que sufren a diarios gays, lesbianas, transexuales y bisexuales.
Agradecemos a todo el mundo la difusión de la manifestación de este Sábado pero debido a la aparición de ciertos carteles queremos recordar:1. La manifestación es pacífica (no se tolerarán actos violentos)2. No se lucirán siglas de partidos políticos ni organizaciones pic.twitter.com/hvBzs5p0iH
— Orgullo Frente al Fascismo ??????????????? (@OrgFrenteAlFasc) September 16, 2019
Dejan claro, además, que detrás de esta convocatoria "hay personas LGTBIQ+ individuales que queremos recuperar la calle como espacio de protesta y creemos que se puede hacer sin siglas y sin otras banderas más allá de las que representan la diversidad del colectivo", por lo que está abierta a "a la participación de cualquiera que desee formar parte". Eso sí, tiene un ambiente puramente reivindicativo, descartando el carácter festivo de la tradicional marcha del Orgullo.
Será a las 19:00 horas cuando dé comienzo la manifestación, arrancando desde la Glorieta de Carlos V, en Atocha. El recorrido pasará por el Paseo del Prado, Cibeles y Paseo de Recoletos hasta concluir en la Plaza de Colón. Además, hacen un llamamiento para que solo se porten banderas del colectivo LGTBI y pide a los asistentes acudur de blanco para que sus colores resalten más.