No hacen falta grandes historias para convertirse en protagonistas de bonitos gestos. Cuando prácticamente se ha perdido la fe en la humanidad, cuando la corrupción es el pan de cada día de nuestra política, ciudadanos anónimos son capaces de dar ejemplo regalando un poco de esperanza.
Si hace unas semanas un pueblo de León, Bembibre, fue noticia por un 'sinpa' de récord en el que 120 personas huyeron de un bautizo haciendo la conga dejando una cuenta de 2.000 euros, esta historia destaca, precisamente, por todo lo contrario. El pasado 22 de febrero un cliente acudió al Bar La Estación en la localidad abulense de Candeleda. El protagonista de esta historia pidió una tortilla francesa, una ensaldilla rusa y un refresco. Cuando terminó, el comensal se fue sin pagar.
Todo hubiera quedado en una desagradable anécdota sino fuera por lo que 17 días después ha relatado el responsable del bar. A través de Facebook ha compartido la carta enviada por aquel comensal en la que explica lo ocurrido con una profunda disculpa. El autor de la carta detalla lo que se pidió en el bar y confiesa que se fue sin pagar por un "despiste estúpido", por lo que pide perdón por la inconveniencia".
No se queda solo en una disculpa y el anónimo personaje también manda un billete de 20 euros para pagar la cuenta y compensar los daños causados. Un gesto que no ha pasado desapercibido y ha sido compartido por la página de Facebook del bar La Estación convirtiéndose en todo un fenómeno viral. Todos los usuarios de esta red social han aplaudido el bonito detalle bautizando a aquel amante de la ensaladilla rusa como "el último español honrado".