Corría el año 2017 cuando Hazte Oír lanzó a las calles un autobús tránsfobo que señalaba directamente a los menores trans bajo el lema "Los niños tienen pene, las niñas tienen vulva. Que no te engañen", a lo que le acompañaba otra frase para negar su identidad: "Si naces hombre, eres hombre. Si eres mujer, seguirás siéndolo". Por aquel entonces, el grito de la sociedad fue unánime condenando el ataque de odio de la asociación ultracatólica, pero cuatro años después, el auge de la extrema derecha ha provocado que la campaña renazca y esta vez apoyada por el Partido Feminista de España.
Mientras la Ley Trans se tramita en mitad de un encendido debate entre el Ministerio de Igualdad, en manos de Irene Montero, y la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, que plantea dudas sobre la libre autodeterminación de género, histórico derecho reclamado por el colectivo trans y piedra angular de la norma, desde Hazte Oír y desde VOX han aprovechado para dar rienda suelta a su transfobia. A nadie sorprende las posturas de la extrema derecha y de grupúsculos ultraconservadores en lo que se refiere a diversidad. La novedad es que también se está haciendo oposición desde un sector que se hace llamar feminista pero que no duda en excluir a las mujeres trans, especialmente vulnerables.
Hazte Oír ha organizado un acto, celebrado el pasado martes 23 de marzo, recuperando el lema de aquel infame autobús, bajo el nombre "Desmontando la Ley Trans. Si naces niña, lo seguirás siendo". En él han tratado de analizar lo que implica esta norma, su redacción y sus consecuencias. Para ello, han contado con la participación de Alicia Rubio, diputada de VOX en la Asamblea de Madrid que defiende que se puede "cambiar" la orientación sexual y que aseguró que "el feminismo es cáncer". Esto no ha impedido que Lidia Falcón, presidenta del Partido Feminista de España, se haya sentado con ella en el pseudo simposio tránsfobo de Hazte Oír. Ambas han catalogado a la Ley Trans como "peligrosa" y anticonstitucional.
En su intervención, Falcón se ha puesto catastrofista ante la posibilidad, según ella, de que la sociedad pueda adoptar esta "filosofía" de que "los seres humanos no existen", siguiendo las directrices de "campañas" que dicen que hay personas que "no se sienten bien en su cuerpo" y que, por ello, hay que "mutilarlo", "modificarlo" o "cambiarlo". El texto de Igualdad, ha considerado la presidenta del Partido Feminista, llevará al país a una "distopía" por la que se busca un mundo "sin hombres y mujeres" y basado en un género que "no existe".
También en contra de la Ley de Violencia de Género
Lidia Falcón, durante su intervención, ha llegado a defender que "estos lodos" vienen por la aprobación en 2004 de la Ley Contra la Violencia de Género porque, según su tesis, "eliminó" a la mujer y la convirtió al género como término que "importa". La Ley Trans, ha señalado, deja a España en una situación que considera "peligrosa" y ha catalogado a sus responsables de "descerebrados" que "se han metido en competencias feministas". Cómo no, ha catalogado a Irene Montero como la peor Ministra de Igualdad de la historia.
De manera similar se ha expresado Alicia Rubio y es que la postura de la extrema derecha y del Partido Feminista es la misma. La diputada ultra ha señalado que la norma que prepara el Ministerio de Igualdad vulnera "la igualdad ante la ley" de los españoles, genera "indefensión judicial", "viola la libertad de expresión y de opinión" y "se cargan el derecho de los padres a educar a sus hijos en sus valores".
Bulos y patología
La de VOX, repitiendo uno de los bulos más difundidos sobre la nueva Ley Trans, ha manifestado lo peligroso que sería que mujeres trans entren en categorías femeninas en el deporte, o su inclusión en otros ámbitos como Eurovisión o Miss España. Además, ha advertido del riesgo de que personas que se autodeterminan de un género puedan entrar en baños o cárceles del género contrario. Lidia Falcón ha apoyado estas tesis y ha ido más allá denunciado la presencia de mujeres trans ocupando cuotas femeninas en partidos políticos, instituciones o responsabilidades en las empresas.
Si la Ley Trans pretende hacer efectiva la despatologización de la transexualidad, según dictó la OMS en 2018, lo que pretenden las voces que se oponen a ellas es todo lo contrario, que se siga considerando una enfermedad. Así lo ha expresado Alicia Rubio, al considerar que la disforia de género no se puede eliminar de la legislación porque "es una patología que necesita una serie de recursos médicos".