Ante la propuesta que ha lanzado la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, una de las primeras grandes superficies en reaccionar ha sido Carrefour, que ha lanzado una cesta básica de 30 euros que ha anunciado en sus redes sociales. Ante este comunicado, las organizaciones de consumidores ya están analizando las propuestas para posicionarse.
El portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Enrique García, ha reconocido que celebra que alguien haya decidido bajar los precios en un "contexto donde todo el mundo los sube", aunque ha matizado que "habrá que ver qué tipo de productos son, la importancia de la bajada", así como el peso en el reparto del gasto habitual en alimentación de las familias, tal y como ha declarado a LaSexta.
En este sentido, ha destacado que "cualquier iniciativa que baje los precios, bienvenida sea, pero habrá que ver el efecto o si es una campaña de imagen o si de verdad tiene efecto y alivia la situación de las familias, especialmente de las que menos recursos tienen".
Tope a los alimentos
El portavoz de la OCU también se ha referido a la medida propuesta por Yolanda Díaz, sobre la que ha reconocido que todavía es pronto para realizar una valoración en términos generales, porque aunque la intención es bajar los precios de determinados productos, "de ahí a cómo se haga, hay enormes diferencias".
En este sentido, considera que un acuerdo con distribuidoras y una limitación de precios a través de un decreto que los regule tendrían "efectos diferentes". Igualmente, los productos que se puedan incluir en la iniciativa también tendrían un impacto muy diferente en los ciudadanos. "No es lo mismo la leche, la pasta o los huevos, cada uno tiene una evolución distinta y un peso distinto en la cesta de la compra", ha explicado.
En todo caso, ha incidido en que los precios de los alimentos se han disparado, hasta el punto de que "una familia media va a pagar, en este año 2022, 815 euros más en alimentos de los que pagamos el año pasado". Se trata además, explica, de un fenómeno que resulta "asimétrico", denuncia, ya que "afecta más a los consumidores vulnerables". Por ello señala que la OCU propone "cheques de alimentos que vayan directamente a las familias que más necesidad tienen en cuanto al gasto en alimentación".