Desde que comenzara la crisis económica, millones de familias han visto como su vida se traducía en precaridad a golpe de paro y desahucios. Los recortes en gasto público han empeorado la situación para que, como siempre, los ciudadanos y ciudadanas acaben pagando el pato.
Mientras que unos se han visto obligados a apretarse el cinturón hasta la asfixia, otros lo han tenido más fácil, como La Conferencia Episcopal Española (CEE), que ha matenido una financiación pública estable a través de la asignación tributaria incluso en los momentos más trágicos de la crisis. Desde que el actual modelo entrara en vigor allá por 2007 durante el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, la Iglesia católica se ha hecho con 2.500 millones de euros.
Hay que tener en cuenta que esta cifra solo refleja el dinero percibido gracias a los contribuyentes que cada año marcan la casilla de la Iglesia en la declaración del Impuesto sobre la Reta de Personas Físicas (IRPF). Así, tal y como recoge Público, no se contabilizan otros ingresos obtenidos de las administraciones públicos ni los beneficios fiscales de los que goza.
Es cierto que Hacienda desempeña un papel de recaudador y se limita a hacer realidad el deseo de aquellos que libremente han querido que sus impuestos financien a la Iglesia, sin embargo esto no les obliga a desembolsar niguna cantidad adicional, es decir, que el dinero sale de los Presupuestos Generales del Esrado, por lo que acabamos pagándolo entre todos, tengan las mismas creencias religiosas o no.
A qué se dedica el dinero
Según datos proporcionados por los obispos, el número de declarantes que marcan la casilla se sitúa en torno a los siete millones, lo que supone alrededor del 35% del total.
La asignación tributaria anual ronda los 250 millones de euros anuales de media. 2008 fue el mejor año a recaudar 252 mientras que el peor fue 2007 en el que se contablizaron 241. Este dinero sirve para costear las actividades de las 70 diocesis españolas, la Seguridad Social del clero (que cotiza por el salario mínimo interprofesional) y el sueldo de los obispos. De ahí, su aportación a Cáritas es de unos seis millones mientras que pata el sostenimientos de 13tv se destinan diez millones.