La situación en Palestina continúa empeorando sin cesar. Durante la noche del 7 de mayo, las fuerzas armadas bajo el mando de Benjamín Netanyahu han tomado control del paso de Rafah, dejando a miles de familias desamparadas y sin acceso a la ayuda humanitaria necesaria.
Esta acción, llevada a cabo con total impunidad por parte del Gobierno de Tel Aviv, ha desencadenado una oleada de protestas en universidades de todo el mundo, enfrentándose a una fuerte respuesta policial.
El movimiento de protesta, que tuvo inicio en Estados Unidos, se ha propagado a países como México, Australia, Japón y Países Bajos. En España, los estudiantes han anunciado diversas acampadas y concentraciones en rechazo al genocidio de Gaza.
En ciudades como Barcelona, València, Euskadi, Madrid, Málaga, Alacant y Sevilla, se llevarán a cabo acciones similares, llevando tiendas de campaña a los campus universitarios.
Aunque muchos profesores y trabajadores académicos respaldan estas iniciativas, la respuesta de ciertos sectores políticos ha sido adversa. Por ejemplo, el Gobierno de Ayuso ha instado a mantener la política fuera de las aulas, una postura que ha generado confusión en la comunidad universitaria.
La derecha mediática, en particular, ha criticado duramente las acciones de protestas llevadas a cabo por el movimiento estudiantil. En este sentido, el diario El Español ha destacado por su habilidad para distorsionar la realidad. En un reciente titular, rezan: "Las comunidades judías y 50 asociaciones denuncian el antisemitismo en las universidades españolas".
Sin embargo, como señala el periodista y escritor Miquel Ramos en X (Twitter), "la mayoría de las asociaciones ni están registradas, ni consta referencia alguna de ellas en la red". Este bulo ha sido rápidamente desmentido, evidenciando la fragilidad de las mentiras ante la verdad.
No existen esas 50 organizaciones. La mayoría ni están registradas, ni consta referencia alguna de ellas en la red. El comodín del antisemitismo es lo único que les queda para justificar su apoyo a un genocidio. https://t.co/MgfcA2094u
— Miquel Ramos ???? (@Miquel_R) May 6, 2024
23 no figuran en ningún registro
Según el diario Público, de las 50 asociaciones a las que se refiere El Español, 23 no figuran en ningún registro y todas replican la misma fórmula en la nomenclatura. "El comodín del antisemitismo es lo único que les queda para justificar su apoyo al genocidio", denuncia el periodista.
Miquel Ramos no ha sido el único en sacarle los colores a la noticia que publica El Español. Los tuiteros se hicieron eco de este bulo y han acusado al periódico que dirige Pedro J. Ramírez de "dar voz a los genocidas asesinos".
Confunde antisemitismo con antisionismo. No saben de lo que hablan.
— Tawfi???? (@tawfi78682819) May 6, 2024
Denunciar un genocidio es muy antisemita estos días...
— Nacho Pulido (@ipulidob) May 6, 2024
De esta manera, la derecha se ha agenciado del término 'antisemitismo' para deslegitimar cualquier crítica al genocidio de Israel sobre la Franja de Gaza, donde han sido asesinadas más de 33.000 personas en los últimos siete meses. Estaremos atentos a ver cuánto se demoran Ayuso y los suyos en apropiarse de este vocablo.
