La empresa de transportes privados Uber ha sido acusada de silenciar las presuntas violaciones que algunos de sus conductores han cometido contra mujeres. Nueve mujeres, de forma anónima, han demandado colectivamente a la compañía por obligar a solucionar estos casos de forma privada y no pública, para así evitar una repercusión social negativa.
La denuncia, presentada en California, viene acompañada de unos documentos jurídicos que atestiguan su versión. En ellos, se establece por contrato que las denuncias por abuso sexual deberán ser tratadas mediante arbitraje, lo que suele desembocar en acuerdos confidenciales que se resuelven sin garantías y con el único fin de que no salgan a la luz.
La respuesta de Uber ha sido sorprendente al presentar una moción alegando que las pasajeras ya acordaron en su momento tratar este asunto mediante arbitraje, por lo tanto ya no pueden ir a juicio. Arrepentimiento por las prácticas de algunos de sus empleados, cero.
El arbitraje es una medida habitual en las grandes empresas. De hecho, en la actualidad solo Microsoft lo ha eliminado, y de forma reciente además, con el fin de que los trabajadores puedan expresarse libremente.
Uber defiende el arbitraje mientras aumentan las críticas a la compañía
A pesar de la moción presentada por Uber, las demandantes esperan que el procedimiento siga adelante. "Nuestras clientas se merecen un juicio", señala Jeanne Christensen, una de las abogadas. "El objetivo es forzar a Uber a que reconozca que esto está pasando y haga algo al respecto".
Christensen asegura que las mujeres que han presentado la denuncia están "horrorizadas y conmocionadas por lo que les ha pasado, pero también porque la gente no habla de esto y porque Uber haya podido esconder de las medios todos estos casos".
Entre los casos que comenta está el de una mujer de Miami que fue llevada por el conductor de Uber a su apartamento aprovechando que estaba bajo los efectos del alcohol, donde la violó, o el de una chica de Los Ángeles que sufrió abusos sexuales al quedarse dormida en el coche.
El portavoz de la compañía, sin embargo, defiende el arbitraje como el mejor medio para que las mujeres denuncien: "Las acusaciones presentadas en este caso son importantes para nosotros y nos las tomamos muy en serio. El arbitraje es la vía apropiada para estos casos porque permite a las demandantes hablar públicamente todo lo que quieran y tener el control sobre su privacidad individual al mismo tiempo".
No obstante, esta misma persona no respondió si las víctimas realmente pueden denunciar en público los abusos sexuales o están sujetas bajo claúsulas de confidencialidad, como señala El Diario.
Mientras, las mujeres que han presentado la demanda esperan que el juicio se lleve a cabo, y lograr así visibilizar la violencia y que más víctimas se atrevan a contar sus amargas experiencias en un Uber.