Los hechos ocurrieron en 2017, y aún no han sido juzgados los nueve acusados de impedir en el centro de Sevilla el paso al autobús de la organización ultracatólica Hazte Oír que difundía mensajes contra la transexualidad.
La organización llegó a solicitar condenas de hasta 12 años de prisión, al alegar que había una serie de delitos adicionales, como los de odio y ofensas a su moral, y el juicio, que iba a comenzar este martes 24 de octubre, ha sido suspendido a última hora, al ser trasladado para que sea juzgado por la Audiencia Provincial y no en un juzgado de lo Penal.
Protestas contra Hazte Oír en Sevilla
"Los niños tienen pene, las niñas tienen vulva. Que no te engañen. Si naces hombre, eres hombre. Si naces mujer, seguirás siéndolo". Este era el lema que lucía el autobús en sus laterales para protestar contra las leyes de identidad de género aprobadas en varios puntos de España. Según la organización, estaban imponiendo a los menores una "ideología política muy concreta, la ideología de género", vulnerando el artículo 27 de la Constitución.
En su recorrido, el autobús llegó a Sevilla, donde la multitud interrumpió su paso cuando circulaba por el Palacio de San Telmo, sede de la presidencia de la Junta de Andalucía, comunidad pionera en aprobar una ley que reconociera el derecho a la autodeterminación de género. Ignacio Arsuaga, presidente de Hazte Oír, trató de entregar un documento a la socialista Susana Díaz, entonces presidenta del gobierno andaluz, pero los lanzamientos de piedras y naranjas, todo ello unido a la presión de la policía que protegía la marcha del vehículo, lo impidieron.
Debido a esto, la organización ultracatólica calificó los hechos como constitutivos, entre otros, de un delito previsto en el artículo 510.1 del Código Penal (delitos de odio), lo que ha hecho que la causa corresponda finalmente a la Audiencia Provincial de Sevilla.
El ministerio público ha pedido un año y medio de prisión para cada uno de los acusados por los delitos de desórdenes públicos y daños, además del pago de 3.478 euros a la empresa del autobús. Sin embargo, la organización ha pedido 12 años de cárcel para cada acusado, ya que sostiene que influyen en el caso delitos de discriminación, coacciones e integridad moral.
Hazte Oír realiza una acusación particular para un caso que fue archivado en 2018 pero que terminó reabriéndose después de los recursos de la Fiscalía y de la propia organización por los daños materiales de los que se acusa a los jóvenes. La Policía ya puso a los acusados en el punto de mira con un informe que relataba, además de la actuación hacia el autobús, su vinculación con colectivos o asociaciones "activistas antifascistas de extrema izquierda".
Declaraciones de los acusados
Los jóvenes ya declararon el pasado 26 de octubre de 2017. "¿Daños y coacciones al autobús de HazteOir? Yo sí que he recibido daños y coacciones por ser un joven transexual", relataba uno de los encausados antes de entrar a declarar.
El colectivo SOCORRE (Solidaridad Contra la Represión) y la Red de Maricones del Sur lanzaron una campaña en apoyo y solidaridad hacia las personas acusadas para reunir dinero con el que asumir la defensa durante el proceso penal que ahora llegará a los juzgados.
